En declaraciones a los periodistas antes de intervenir en una jornada sobre ‘Los retos de la industrialización en España’, organizada por el American Bussines Council, el ministro defendió la rebaja de impuestos de los años 2015 y 2016 y destacó la necesidad de seguir avanzando en esa línea.

Montoro señaló que la caída del paro en mayo es “muy positiva” y se debe, “en buena medida”, a que “hemos bajado los impuestos”. Por ello, sobre el debate de los impuestos que hay en la precampaña electoral señaló que “en España ya hemos bajado el IPRF y Sociedades, y esas bajadas están en el fundamento de la creación de empleo”.

“España crece más que otros países por la recuperación del consumo, la inversión de las empresas y la demanda interna, y eso tiene muchísimo que ver con la política presupuestaria” implementada y que ha recogido reducciones de impuestos en IRPF y Sociedades en 2015 y 2016 y que han supuesto “poner en manos de empresas y particulares unos 9.000 millones de euros”, expuso.

Según Montoro, el 26 de junio en las elecciones los españoles tendrán que elegir entre esta política o aquellos a que quienes bajar impuestos “no se les ha dado nunca bien, como el PSOE”, que “amenazan con nuevas subidas”.

También están en liza, recordó, “nuevas formaciones”, que “deberían estudiar mejor el resultado de la bajada que se ha hecho en España”. Así, indicó que el PP está “comprometido con reducir impuestos” mientras que a otros “no se les ocurre otra cosa que amenazarnos con subirlos”.

Respecto si una nueva bajada de impuestos es posible tras la caída de la recaudación tributaria hasta abril, comentó que es “completamente compatible”. En este sentido, afirmó que el “punto débil” de la recaudación ha sido el pago fraccionado en el Impuestos sobre Sociedades, que es consecuencia de cambios normativos y cuyo efecto se diluirá a lo largo del año.

MECANISMOS DE LIQUIDEZ

Durante la clausura de la jornada, el ministro defendió también el papel que han jugado en estos años de crisis los distintos mecanismos de liquidez que se han puesto en marcha para permitir, entre otras cosas, que las comunidades autónomas puedan hacer frente a los pagos a sus proveedores y combatir la morosidad. Lo contrario, señaló, era “impresentable” y generaba “desconfianza”.

Además, quiso dejar claro que las administraciones han de “favorecer que las empresas tengan las mejores condiciones de competitividad y, por descontado, innovación tecnológica”.

“Los próximos tiempos van a ser muy muy positivos” para a economía española “si sabemos hacerlo bien”, algo que garantizó porque “no nos va a fallar la inteligencia”.

“Españas es un país atractivo, generador de inversiones y vertebrador de actividades económica, donde la industria ha de tener el papel que merece en una sociedad plenamente desarrollada como es la española”.