Guedes dijo a Servimedia que, en primer lugar, "el Gobierno español tiene que ofrecer ese avión no sólo a Fariñas, sino a los 26 presos políticos que están enfermos y por los que está haciendo la huelga". Razonó que a Fariñas "difícilmente lo dejen regresar, como él pide", y, "si lo dejan regresar y persiste en la huelga, estamos en las mismas".

Por todo ello, recomendó a España y a la UE que ofrezcan asilo a los presos enfermos que deseen abandonar Cuba y a sus familias; recordando, eso sí, que hay "muchos más presos de los 53 de la Primavera Negra de 2003", en concreto "alrededor de 200".

En cualquier caso, Guedes indicó que "lo fundamental" es que en Cuba "hay una dictadura que viola los derechos humanos", y que, ignorándolo, "nos quedamos en la anécdota, por importante que sea". Dijo que "hay que agradecer el gesto humanitario, pero que con él "no se está exigiendo al régimen las cosas fundamentales" e incluso "se le está quitando problemas", porque "la tensión internacional" está en la huelga de hambre.

Más conforme se mostró este opositor con la actitud de la UE. "La Posición Común no se iba a cambiar ni siquiera antes de estos acontecimientos", afirmó, "porque había países como Alemania, Suecia, República Checa, Polonia e Italia, que no estaban dispuestos. Y, después de esto, muchísimo más".

El vicepresidente de la Unión Liberal Cubana admitió que, hasta el momento, "ninguna política ha modificado sustancialmente el sistema cubano", pero, en su opinión, "hay unas políticas más eficaces que otras". Según precisó, "no tiene que ser necesariamente de ruptura ni de embargo comercial, pero tiene que ser una política más firme que la del Gobierno español".

Concretamente, Guedes reclamó una postura común de toda la UE, y un "doble diálogo, con el régimen y con los opositores", que envíe un mensaje al primero apostando por la transición y otro a los segundos garantizándoles su apoyo ético, político y económico, asesorándoles por Internet y recibiendo "ostensiblemente a los disidentes en las embajadas".