La Unesco certifica que 2009 acabó con récord de periodistas asesinados
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La Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) afirmó hoy que durante el año pasado se produjeron 77 asesinatos a periodistas, lo que supone un nuevo récord, en lugar de las 69 muertes de 2006, año marcado por la violencia en Iraq.
En un informe titulado "La seguridad de los periodistas y el riesgo de impunidad", la Unesco se mostró alarmada por el aumento de asesinatos a periodistas y afirmó que la mayoría de estos crímenes se producen en países en situación de paz, pero en los que revelar información delicada (narcotráfico, violaciones de derechos humanos, corrupción...) puede suponer correr riesgos mortales.
Se trata del segundo estudio de la Unesco sobre este tema, después del realizado en 2008, y en este trabajo la Unesco recuerda que la ausencia de amenazas es "esencial para la defensa del derecho de todos los ciudadanos a tener informaciones fiables y para el derecho de los periodistas a hacer públicas esas informaciones sin temer por su seguridad".
Entre 2008 y 2009, la Unesco condenó el asesinato de 125 periodistas, una cifra comparable al periodo anterior (2006-2007), cuando esta agencia de la ONU denunció un total de 122 asesinatos.
Al menos 80% de esas muertes se debieron a ataques directos y específicos contra sus víctimas, es decir, a "agresiones deliberadas por parte de gente que no quiere que los periodistas investiguen y revelen información al público".
El aumento del año pasado se explica en parte por el asesinato de 30 periodistas en un solo día, el pasado 23 de noviembre en una emboscada en Filipinas. Debido a este ataque excepcional, Filipinas, con 37 asesinatos, se convierte en el país más mortal, delante de Iraq, donde el número de víctimas pasó de 62 a 15 entre los periodos 2006-2007 y 2008-2009.
Otra evolución notable del nuevo estudio es que entre 2008 y 2009 crecieron considerablemente el porcentaje de asesinatos no relacionados con situaciones de conflicto interno.
La mayoría de las víctimas del año pasado no eran corresponsales de guerra extranjeros, sino periodistas locales que trabajaban en países generalmente en paz sobre temas de interés local. Además, en la mayoría de los casos (95%), se trataba de hombres.
El informe de la Unesco constata que, "lamentablemente, la frecuencia de los actos de violencia contra periodistas está aumentando. En la mayoría de los casos, la impunidad impide actuar a la justicia y, si esta tendencia persiste, los periodistas serán presa fácil. Huelga decir que esta situación supone una grave amenaza para la libertad de expresión y para nuestra capacidad de buscar la verdad".
(SERVIMEDIA)
23 Mar 2010
MGR/lmb