La organización indicó en un comunicado que a pesar de que la compañía alemana anunciara una inminente llamada a los propietarios de los vehículos afectados para su reparación, “siete meses después del estallido del escándalo son muy pocos los vehículos que han pasado por el taller para solucionar el problema”.

OCU señaló que el llamamiento para modelos como el Passat, previsto para el mes de marzo, “está detenido” y que solo el modelo Amarok, de venta muy minoritaria en España, ha sido llamado para esta reparación.

Además, la organización añadió que, según informan medios alemanes, las autoridades de homologación han detectado que una vez retirado el software engañoso, el nivel de consumo de los vehículos reparados se incrementa.

Para OCU, estas noticias son “preocupantes”, porque “mostrarían que la campaña llevada a cabo por parte del fabricante alemán buscaba únicamente ganar tiempo tranquilizando a los afectados con datos que no eran ciertos”.

“Pero más grave aún es el hecho de que los propietarios siguen sin ninguna garantía de que el problema provocado por Volkswagen con su engaño vaya a poder ser solucionado sin coste alguno para ellos, empezando por el del consumo de combustible”, concluyeron desde la organización.