Garzón se reunió en el Congreso de los Diputados con representantes de UGT y CCOO para analizar la situación política y volvió a apelar al diálogo entre PSOE y Podemos, justo un día antes de la reunión entre sus líderes, Pedro Sánchez y Pablo Iglesias, y mientras Sánchez estaba reunido en otra sala con el presidente de Ciudadanos, Albert Rivera.

Inisistió en la necesidad de conformar un Gobierno "progresista de resistencia" para revertir las leyes "regresivas" aprobadas por el PP que siguen en vigor y garantizar la recuperación de derechos para la mayoría social.

Ese análisis, aseguró, es compartido con los sindicatos, como también lo es la "preocupación" por la posibilidad de que ahora o tras unas nuevas elecciones se configure un nuevo Gobierno sustentado en el PP.

Cuando los sindicatos apelan a que no se sigan desarrollando "las mismas políticas" que en los últimos años desde IU-UP "interpretamos libremente" que no solo se refieren al PP sino también a Ciudadanos, aseguró Garzón.

Mientras el acuerdo del PSOE con Ciudadanos se mantenga en los términos en los que se presentó ante el Congreso de los Diputados en la fracasada investidura de Pedro Sánchez como presidente del Gobierno la única respuesta posible por su parte es "no". Si como resultado de una negociación ese texto se modifica, añadió, "veremos".

En su opinión, "todo pasa" por la reunión que mañana mantendrán Sánchez e Iglesias, ya que si de ahí no sale una vía de negociación concreta habrá que dejar de "marear la perdiz" y asumir el escenario de repetición de elecciones.

Ramón Górriz, secretario confederal de Acción Sindical de CCOO, aseguró que el “peor escenario” que se presenta para los trabajadores es la repetición de elecciones generales, por lo que planteó al conjunto de las fuerzas políticas “la necesidad de que acuerden” para que no siga gobernando el PP. “Sería claramente una involución en la regeneración democrática que necesita este país”, manifestó.

Por su parte, María del Carmen Barrera, secretaria confederal de Políticas Sociales, Empleo y Seguridad Social de UGT, trasladó a Garzón que “cada día cuenta” para formar nuevo Gobierno y para acometer reformas que acaben con la desigualdad mediante el impulso de las políticas sociales.