Rodríguez Sendín hizo estas declaraciones a los periodistas a raíz de la retirada de un máster sobre homeopatía de la Universidad de Barcelona por “falta de base científica”. en una jornada sobre la medicalización de la vida organizada por los colegios de médicos y celebrada en la capital de España

El presidente de los colegios de facultativos señaló que la retirada de este máster es una respuesta a las demandas de la OMC, que ya en 2013 redactó una declaración en la que recordaba que “ todos los médicos están obligados por las normas del Código de Deontología Médica a emplear preferentemente procedimientos y prescribir fármacos cuya eficacia se haya demostrado científicamente”:

El texto, aprobado en una asamblea general de la organización celebrada en Granada, apunta, asimismo, que “no son éticas” las prácticas “de base científica” ni “los procedimientos ilusorios o insuficientemente probados” como es el caso, según Rodríguez Sendín, de la homeopatía.

Desde esta perspectiva, el presidente de los colegios de médicos entiende que no debe sorprender el hecho de que se haya suspendido el máster sobre homeopatía en Barcelona y sí que no haya ocurrido antes.

“No se puede seguir engañando a la gente con procedimientos ilusorios que no tienen ningún tipo de justificación y que pertenecen al mundo de las creencias”, aseveró.

Eso si, reconoció el presidente de la OMC que hay colegios de médicos que cuentan con una sección de homeopatía y dijo que están ahí “porque existen desviaciones” y porque en esta vida no todo es perfecto.

Y sobre todo, insistió, porque los facultativos que practican la homeopatía creen en ella y piensan que funciona, algo que, a su parecer, ocurre porque cada paciente vive una enfermedad y sus consecuencias a su manera.

Por otra parte, el presidente de la Organización Médica Colegial señaló que no puede sancionarse a quienes usan la homeopatía porque es una terapia alternativa permitida por la ley y que, por tanto, mientras no haga daño, no es punible.

Finalmente, Juan José Rodríguez Sendín se felicitó por que España no haya desarrollado, como sí han hecho otros países europeos, una directiva que regula el uso de la homeopatía, una terapia alternativa, dijo, con muchos intereses y peso económico.