La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) señaló este miércoles en una nota informativa que este episodio comenzará el viernes con la entrada de un frente frío por el norte peninsular, que provocará precipitaciones persistentes en el área cantábrica y cuya descarga fría postfrontal hará descender la cota de nieve al final del día hasta entre 800 y 1.000 metros en el norte y de 1.000 a 1.200 metros en los sistemas montañosos de la zona centro.

Las precipitaciones persistirán en el norte peninsular hasta el miércoles de la próxima semana, y se extenderán con menor intensidad a zonas de la mitad sur, sobre todo a zonas montañosas del sureste.

La cota de nieve prevista entonces se situará entre 600 y 800 metros en el norte, de 800 a 1.000 metros en el centro y de 1.000 a 1.200 metros en las montañas del sureste.

Dada la larga duración de este episodio, se esperan acumulaciones importantes de agua en el litoral cantábrico y de nieve sobre todo en la Cordillera Cantábrica, donde podrán acumularse espesores de un metro durante esos días.

El viento será también un fenómeno adverso durante el episodio, puesto que a partir de la tarde del viernes se esperan rachas de intensidad muy fuerte en el área cantábrica, tanto en tierra como en la costa.

Las temperaturas experimentarán un descenso generalizado más acusado a lo largo del próximo sábado y el viento del norte, ocasionalmente fuerte, hará aumentar la sensación de frío de estos días.

Esta situación irá remitiendo probablemente a partir del próximo miércoles, aunque la Aemet precisó que aún podrán persistir las nevadas en cotas bajas del área del Cantábrico oriental y de Pirineos.