Merino, que compareció hoy en Comisión Parlamentaria para explicar la situación en que se encuentran estos trámites, informó de que el Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino está estudiando actualmente la solicitud, presentada por la Asociación de Productores de Plátano de Canarias (Asprocan), que ha dado el paso definitivo para que esta marca pase a tener reconocimiento comunitario y por tanto a beneficiarse de la protección y acciones que tiene prevista la Unión Europea para alimentos de calidad diferenciada.

El pasado 21 de enero, Asprocan presentó ante el Instituto Canario de Calidad Agroalimentaria (ICCA) solicitud de registro de la Indicación Geográfica Protegida "Plátano de Canarias", culminando un proceso iniciado en 2009, y el pasado 8 de febrero, el Instituto remitió la petición al Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino, que hasta la fecha no ha solicitado mejora de información ni aclaración alguna.

El expediente ha de someterse a exposición pública, para más tarde ser remitido a la Unión Europea. El plazo estimado para tener el reconocimiento definitivo será de unos dos años.

Obtener una IGP implicaría para la marca gozar de protección pública en territorio comunitario, y que sólo la fruta obtenida en las islas, sujeta a los controles y certificación requeridos, pudiera venderse haciendo alusión alguna al Archipiélago, evitando así la competencia desleal.

El acogerse a este distintivo europeo permitirá a los operadores beneficiarse de las ayudas comunitarias a la certificación de producto así como a las de promoción gestionadas por el ICCA y que ayudarán difundir las bondades del producto en cualquier punto de la geografía comunitaria.