Así lo traslaron fuentes socialistas a Servimedia, que avanzan que el líder socialista hará "un discurso fresco, dinámico y propositivo" en la primera ocasión en democracia en la que el candidato a la investidura no es de la fuerza política más votada y, también, en la que se enfrenta a una posible investidura fallida.

Las mismas fuentes aseguran que Sánchez apelará "a la responsabilidad" de las fuerzas políticas para "desbloquear la situación", "permitir un gobierno del cambio" y "así evitar unas nuevas elecciones", que supondrían "fracasar en el encargo que nos hicieron los españoles en las urnas el pasado 20 de diciembre".

Lo hará tras firmar el pasado miércoles un acuerdo de gobierno con el líder de Ciudadanos, Albert Rivera; con el previsible voto a favor de la diputada de Coalición Canaria, Ana Oramas, y después de haber ofrecido este lunes a Podemos y a sus confluencias, a IU-UP y a Compromís documentos concretos de gobierno para intentar sumar los apoyos suficientes a su investidura.

Sánchez, cuya intervención será seguida desde la tribuna del Congreso por su mujer, Begoña Gómez, y por sus padres, realizará "una radiografía" de la situación política, institucional, económica y social del país y hará un llamamiento constante "al diálogo entre fuerzas políticas".

En el discurso de este martes, el único de la jornada y previo a la votación del miércoles, en la que necesitaría una mayoría absoluta para ser investido, apelará "a la capacidad de entendimiento" de los partidos, con el fin de "poder afrontar una nueva etapa política en la que las mayorías absolutas quedaron atrás".

Desde el PSOE aseguran que Sánchez, en una intervención sin límite temporal, desgranará su programa de gobierno "progresista", en el que primarán ejes como la regeneración democrática, la reconstrucción del Estado del bienestar, la reactivación y modernización económica, el desafío territorial, la reforma de la Constitución o la proyección europea de España.