Lo dijo en una entrevista en la Cope, recogida por Servimedia, al ser preguntada sobre si hay que hacer limpia en el PP tras la dimisión de Esperanza Aguirre como presidenta regional del partido.

A su juicio, hay que “sacudir las sabanas como cuando entras en una casa después de un tiempo, y, sobre todo, motivar a nuestra gente, que lo necesita para sentirse orgullosa de ser del PP”.

Aseguró sentirse con las “manos libres” para tomar las decisiones necesarias para "la buena marcha del partido” y explicó que se hace cargo de la Presidencia de la gestora “en un momento delicado y de vacío de poder”, tras la dimisión de Aguirre y de Ignacio González como secretario general del PP de Madrid.

Cifuentes indicó que su “misión principal es recuperar la ilusión” del electorado. Asimismo, aseguró que cuando se celebre el próximo congreso del PP de Madrid, propondrá que el presidente del partido y los candidatos electorales a la Presidencia de la Comunidad y a las alcaldías se elijan en primarias.

CONDENA LOS ESCRACHES

Por otro lado, condenó el escrache que sufrió ayer el concejal del Ayuntamiento de la capital Javier Barbero y dijo que está en contra de estas acciones, “lo haga quien lo haga, porque es una forma de violencia”.

Recordó que ella sufrió varios escraches, uno de ellos en la puerta de su domicilio, y que “no se hicieron condenas por parte de los compañeros de viaje de Barbero, que entonces decían que era legítima libertad de expresión”. “Cuando les pasa a ellos es fascismo e incitación al odio”, añadió.

Preguntada por la posibilidad de que el PP se abstenga en un acuerdo PSOE-Ciudadanos, dijo que primero habría que ver el contenido del acuerdo y el programa, “pero sería difícil explicar a los siete millones de votantes populares que dejamos gobernar a quienes nos han insultado”.

Asimismo, se mostró convencida de que no peligraría su Gobierno si hubiera un acuerdo PSOE-Ciudadanos a nivel estatal.