En una reunión informal con periodistas, el secretario general del Grupo Parlamentario Popular en el Congreso de los Diputados, José Luis Ayllón, destacó la “descoordinación” que a juicio del PP está mostrando el Gobierno para afrontar la crisis frente a la unidad mostrada a la hora de defender al juez Garzón.

Preguntado por qué el PP sí puede salir en defensa de miembros de su partido imputados en causas judiciales pero no puede hacerlo en cambio el Gobierno, Ayllón señaló que quien quiera defender a Garzón, un ciudadano, un líder político o un diputado, puede hacerlo, pero no un miembro del Gobierno, máxime cuando pretende “con sus declaraciones que el Poder Judicial se posicione en un sentido o en otro”, lo que supone “ir más allá de la defensa para entrar en la presión”.

Para Ayllón, varios miembros del Gobierno tratar de “hacer una loa de todas las cuestiones que tienen que ver con el señor Garzón pero que no tienen nada que ver con los procesos que tiene abiertos”.

“Yo puedo defender a quien me parezca bien siempre y cuando mi defensa no provoque un conflicto entre los distintos poderes del Estado”, dijo Ayllón, quien aseguró muchos, él incluido, se sienten “muy orgullosos” de muchas de las cosas que ha hecho el juez Garzón, lo que no quita para que sea juzgado por otras actuaciones que “posiblemente no están dentro de la legalidad”.

Preguntado si decir que valorar la trayectoria de Garzón es presionar al Poder Judicial no es interpretativo, Ayllón respondió: “Tengo derecho a interpretar lo que hace el Gobierno”.

El ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, deberá responder a dos preguntas que le formularán los diputados del PP Ignacio Cosidó e Ignacio Gil Lázaro. El primero le pedirá que explique cómo es posible “que en España desciendan los delitos mientras aumentan los ingresos de delincuentes en prisión”, mientras que el segundo le pedirá una valoración de “los premios concedidos a responsables policiales relacionados con el ‘caso Faisán’”, en referencia a que el ex director de la Policía Víctor García Hidalgo, presunto autor del “chivatazo” a ETA, haya sido nombrado consejero general de Caja Vital.