En entrevistas consecutivas en la Cadena Ser y Onda Cero recogidas por Servimedia, Carmena, dentro de su alegación habitual de que ella no es una política profesional y no quiere intervenir ni influir en esos temas, sí apuntó la “conveniencia de descartar el telón de que pueda haber otras elecciones”, porque “eso sería un fracaso”.

Llamó a los polítios a ponerse de acuerdo y aseguró que los resultados electorales “indicaron por dónde ir”: según su interpretación, por “un gobierno que rompa con la corrupción y con el deterioro de la política, y que sea capaz de hacer cosas distintas”.

La alcaldesa, que dijo que ella no es quién para mediar entre los partidos pero que si se lo pidieran lo haría encantada, apostó por un gobierno resultante de “la suma que sea el cambio”, precisando que “el cambio tiene que ver con los grupos y partidos que tuvieran una forma diferente de hacer las cosas”.

Carmena defendió también un gobierno que tenga “eficacia” en impulsar “un cambio definitivo” y “que ayude o refuerce estas alternativas” de actuar en favor de la gente. Por último, dijo que no es partidaria de vetar a nadie cuando se le preguntó por la intención de Podemos de hacer al PSOE elegir entre ellos y Ciudadanos.