Según informó este martes la federación en un comunicado, su Gabinete de Accesibilidad Universal ha examinado las condiciones de accesibilidad de los tres principales hospitales de Madrid, atendiendo al volumen poblacional al que dan servicio (el Ramón y Cajal, La Paz y el Clínico San Carlos), y ha detectado en todos ellos “importantes barreras arquitectónicas”, particularmente en los accesos a dichos recintos sanitarios y a los Servicios de Urgencias de los mencionados hospitales.

En cuanto al Hospital Ramón y Cajal, detalla Famma, la comunicación peatonal entre la entrada de Urgencias y el resto de las entradas del centro a través de la calle San Modesto no cuenta con itinerario peatonal accesible y la acera, con un ancho insuficiente, no permite el tránsito de personas en silla de ruedas.

Del mismo modo, prosigue la entidad, “en el interior de la parcela de este hospital, los vados peatonales no existen o están incorrectamente resueltos y no cumplen la normativa, lo que, además de una clara discriminación, causa situaciones de peligro a las personas con discapacidad”.

También señala el informe que la entrada a algunos servicios sanitarios se realiza a través de rampas con excesiva pendiente que incumplen la normativa, y que los pasamanos no cumplen tampoco con la normativa vigente de accesibilidad.

El paso peatonal existente entre la entrada general al hospital y la estación de Renfe Cercanías, asimismo, no es accesible, y el vado ubicado frente a la puerta principal de dicho centro hospitalario no cumple ninguna condición técnica para ser considerado accesible.

Por otro lado, las plazas de estacionamiento reservadas para personas con movilidad reducida incumplen las medidas normativas y el acceso al Pabellón Docente de dicho hospital tampoco cuenta con un acceso que tenga un itinerario peatonal accesible.

CLÍNICO SAN CARLOS

Con respecto al Hospital Universitario Clínico San Carlos, el estudio afirma que la rampa ubicada en la puerta que está en la esquina suroeste del edificio, entre las puertas L y K, no cumple las condiciones de accesibilidad, al igual que la situada en la puerta L.

Asimismo, prosigue, en el acceso al hospital por la puerta M existe un escalón y aunque hay señalización con el símbolo SIA que lleva a otra puerta lateral, en donde hay una rampa, no es peatonal, sino para el acceso de vehículos, lo que “supone un verdadero

peligro para las personas con discapacidad usuarias de silla de ruedas por su elevada pendiente”.

Del mismo modo, en el espacio libre exterior de este hospital se han detectado “numerosas barreras y problemas de accesibilidad”, como el paso de peatones sin rebaje en uno de sus lados cercano a la puerta M.

También cabe apuntar, añade la federación, que ni las aceras ni las rampas de acceso a la Oficina de Atención al Paciente de dicho hospital ni a una sucursal bancaria cumplen con las condiciones de accesibilidad vigentes, y que las conexiones mediante escaleras entre el Hospital Clínico y la Fundación Jiménez Díaz cumplen la legislación, al no disponer de pasamanos a doble altura.

LA PAZ

Finalmente, indica el trabajo de Famma, el espacio exterior y los itinerarios que bordean el complejo hospitalario de La Paz cuentan con problemas de configuración y de accesibilidad. El vado peatonal a la entrada principal no cumple las características de accesibilidad necesarias y en él se halla una escultura de gran tamaño en un espacio que está señalizado como de paso.

Asimismo, los vados y bolardos situados en las inmediaciones de La Paz “se encuentran en malas condiciones y no cumplen con las características de obligado cumplimiento señaladas en la Orden Ministerial VIV561/2010”.

Además, no existe un itinerario peatonal accesible entre el Paseo de la Castellana y la Avenida de Monforte, a través de la calle Arzobispo Morcillo. Asimismo, frente a la entrada general del hospital, las rampas y escaleras no cuentan con el doble pasamanos que estipula la normativa de accesibilidad en vigor.

También es reseñable que el acceso peatonal y la entrada de consultas externas del Pabellón Maternal no cuente con un itinerario accesible, de forma que las personas con discapacidad se ven obligadas a utilizar la calzada, “lo que supone un riesgo para su propia seguridad e integridad física”.

Del mismo modo, el acceso peatonal a la entrada de consultas externas del Hospital Infantil tampoco cuenta con un itinerario accesible.

Es importante también resaltar que, según ha constatado el Gabinete de Accesibilidad Universal de la federación, no existe un itinerario, en general, accesible a ninguna de las entradas situadas en la zona oeste de este complejo hospitalario, y que, en el interior, existen rampas que no cumplen con las condiciones físicas normativas para estos elementos.