El trabajo de campo de ese sondeo se hizo entre los días 2 y 11 de enero, muy poco después de las elecciones del 20 de diciembre.

En ese momento, sumaban un 3,5% quienes consideraban la situación política general buena (3,3%) o muy buena (0,2%), mientras que un mes atrás, justo antes de las elecciones, sumaban un 6%.

En la mísma línea, subieron del 63,1% al 69,9% quienes la consideraban mala (39,3%) o muy mala (30,6%). Un 23,2% la juzgaba regular.

En cuanto a la situación económica general de España, bajan del 5,1% al 3,8% quienes la consideraban buena (3,6%) o muy buena (0,2%), pero también bajan del 63,6% al 61,9% quienes la creían mala (42,1%) o muy mala (19,8%). El 33,9% la consideraba regular.

El 25,5% de los ciudadanos cree que la situación económica es mejor que hace un año, el 52,8% que es igual, y el 20,2% que es peor. Sobre cómo será dentro de un año, el 26,1% opina que será mejor, el 40,3% que será igual, y el 11,9% que será peor.

Sobre la situación política general, el 11,5% cree que es mejor que hace un año, el 49,2% que es igual y el 35,2% que es peor. El 23,1% opina que dentro de un año será mejor, el 33,2% que será igual, y el 17,2% que será peor.

El sondeo se hizo a partir de 2.496 entrevistas a ciudadanos de 265 municipios de 50 provincias entre los días 2 y 11 de enero, con un margen de error del 2%.