Desglosado por sectores, el consumo industrial creció un 2,4% y el de los servicios bajó un 1%. En el cálculo de estos datos, se han tenido en cuenta los efectos de la composición del calendario y la evolución de las temperaturas, señalaron desde la compañía.

De las cinco actividades con mayor consumo eléctrico, la demanda de la metalurgia aumentó un 0,9%, la industria química disminuyó un 0,7%, la fabricación de otros productos minerales no metálicos aumentó un 6,3%, la industria de la alimentación subió un 1,3% y la del papel bajó un 4,5%.

Por su parte, las actividades que más aportaron al crecimiento del consumo de las grandes empresas fueron la fabricación de otros productos minerales no metálicos con un aumento del 6,3%, la captación, depuración y distribución de agua (+12%), la fabricación de vehículos de motor, remolques y semirremolques (+8,7%) y la metalurgia (+0,9%).