Maroto se expresó así en una entrevista en Onda Cero, recogida por Servimedia, en la que se mostró convencido de que si le dan “los números” y “lo puede explicar”, el líder socialista intentará “un pacto de izquierda radical”.

“No me gustaría estar nunca en la piel de una persona que pasa por lo que pasa Pedro Sánchez, porque es o primer ministro o nada”, aseguró, para advertir de que “cuando alguien está en una tesitura tan extrema puede tomar decisiones extremas” que vayan “contra su partido o contra el país”.

El dirigente popular lamentó que “cada vez” que a Sánchez se le pregunta “diga ‘no es no' al PP”, pero insistió en que su negativa a dialogar tiene que ver con que puede “acabar su carrera política antes de empezarla”.

Sobre si la continuidad del presidente del Gobierno en funciones y líder del PP, Mariano Rajoy, está garantizada, incidió en que no ve “a la mayoría de los políticos en la tesitura de ahora o nada”. “Nadie lo ha pedido”, aseguró, para apuntar que el PSOE expresa “un no para todos” y Ciudadanos ya ha dicho que “no va a hacer las primarias a nadie”.

"QUE SE CAIGA DEL GUINDO"

Maroto lamentó, sin embargo, el “lío” que internamente tiene montado el PSOE. “Es como en el iceberg, en el que sólo se ve la punta, pero hay mucho por debajo; no vale todo con tal de alcanzar el poder”, advirtió.

Señaló, en este sentido, que “sólo hay que esperar a que Sánchez se caiga del guindo” o a que alguien en Podemos no le dé el “sí quiero” o a que “las voces en el PSOE digan 'hasta aquí hemos llegado, vamos a poner orden'”. “Creo que la gente de bien, que la hay y mucha en el PSOE, no se merece esta dirección”, afirmó.

Preguntado por la posibilidad de que Rajoy no se presente a la investidura, Maroto insistió en que “la decisión" de quién es el candidato que va a la investidura depende de Felipe VI, que, dijo, “se convierte en un Rey mediador”. “Rajoy dará su opinión y el Rey decide”, dijo.

Maroto rechazó que el presidente del Gobierno en funciones no esté negociando para formar gobierno, ante las críticas de inmovilismo que está recibiendo. Aseguró que hay “contactos permanentes en el Congreso” y por parte de Rajoy e insistió en que “las relaciones con los grupos son fluidas”.