Un estudio revela que los niveles altos de colesterol pueden ser beneficiosos en la recuperación de un ictus

MADRID
SERVIMEDIA

Los niveles altos de colesterol, temidos hasta ahora por su implicación en enfermedades cardiovasculares y cerebrovasculares como el ictus, podrían ser, paradójicamente, beneficiosos para mejorar la recuperación de los que han sufrido esta enfermedad.

Así lo pone de manifiesto un estudio realizado por investigadores del Hospital del Mar con la colaboración del Massachusetts General Hospital (MGH) de Boston.

El trabajo, publicado en la revista científica "Stroke", demuestra que los pacientes con niveles altos de colesterol y triglicéridos en la sangre (hiperlipemia) presentan menos degeneración de la sustancia blanca del cerebro.

La degeneración de esta sustancia, también llamada leucoaraiosi, se debe a dificultades en la circulación de los pequeños vasos sanguíneos cerebrales y su presencia indica un mayor riesgo de desarrollar un deterioro cognitivo o demencia así como una menor capacidad de recuperación después de sufrir un ictus.

El objetivo del mencionado estudio fue establecer qué impacto tiene la hiperlipemia sobre el grado de leucoaraiosi, en pacientes con un ictus cerebral. Por eso, se analizaron un total de 1.135 pacientes (504 del Hospital del Mar y 631 del MGH), y se midió la severidad de la leucoaraiosi que presentaban para correlacionarlo con la presencia o ausencia de colesterol elevado.

Los resultados obtenidos en ambos centros coinciden en detectar que los pacientes con colesterol elevado presentaban menos degeneración de la sustancia blanca del cerebro, lo que choca con la máxima generalizada de que el colesterol es perjudicial para la salud.

"Es cierto que un nivel alto de colesterol es un factor de riesgo cardiovascular y nos puede llevar a sufrir un ictus, pero también se ha observado que una vez que se ha padecido un ictus, el colesterol contribuye a la recuperación del tejido dañado y mejora el pronóstico", indica Jordi Jiménez, neurólogo del Hospital del Mar.

Y es que, insiste este especialista, "No todo es blanco o negro, el colesterol es dañino para algunas cosas, pero también tiene su papel beneficioso", por lo que es necesario seguir investigando para conocer mejor cómo actúa el colesterol".

Por último, el experto señala que "los resultados (de la investigación) invitan a replantearse el uso de tratamientos agresivos para reducir el colesterol."Nosotros, sin duda, defendemos que se tienen que reducir los niveles altos de colesterol, pero quizás la balanza de riesgos/beneficios deja de ser favorable si reducimos a niveles excesivamente bajos", concluye.

(SERVIMEDIA)
08 Mar 2010
IGA/lmb