Caixa Catalunya prevé que la fusión con Tarragona y Manresa sea rentable a partir de 2012

- Destaca la importancia de la venta del 50% de los seguros a Mapfre y no descarta desprenderse de su participación en Repsol

BARCELONA
SERVIMEDIA

Caixa Catalunya estima que la fusión con Caixa Tarragona y Caixa Manresa no podrá ser rentable hasta 2012 ya que en 2010 y 2011 deberá absorber unos costes de reestructuración de 450 millones de euros.

Así lo explicaron este lunes en una rueda de prensa el presidente de Caixa Catalunya, Narcís Serra, y el director general de la entidad, Adolf Todó, quienes se mostraron confiados de que en esa fecha, en 2012, haya "alguna luz en la macroeconomía".

Por ello, Caixa Catalunya prevé que los 1.315 millones de euros que ha pedido al FROB para ejecutar su fusión con Tarragona y Manresa serán devueltos en un plazo de cinco años y que el ritmo de retorno de las ayudas se incrementará a partir de 2012.

Dicho proceso de concentración está ahora pendiente del beneplácito de Bruselas. Una vez obtenido, las previsiones de Caixa Catalunya son que en un plazo de un mes y medio, las tres entidades hayan aprobado la fusión en sus asambleas y que ésta, tras recibir también el beneplácito de la Generalitat de Cataluña, pueda estar cerrada a finales del primer semestre de 2010.

A continuación, durante el tercer trimestre, se constituirían los órganos de gobierno y de gestión de la nueva entidad, de la que todavía no se conoce el nombre ni la marca.

Más allá de la fusión, Serra y Todó se refirieron a la venta del 50% del negocio asegurador de Caixa Catalunya a Mapfre por 446 millones de euros, una operación que se hizo pública el pasado viernes y que los dirigentes de Caixa Catalunya desvinculan del proceso de integración.

Sobre Mapfre, Todó destacó que "es un magnífico socio estratégico" y que la explotación conjunta del negocio asegurador permitirá a Caixa Catalunya potenciar mucho este segmento de actividad en los próximos tres años".

Según Todó, esta venta "da tranquilidad para poner en marcha el modelo de negocio que tenemos en la cabeza". A este respecto, detalló que permitirá a la entidad poder renunciar a una parte del margen de intereses para poder continuar con la política de fidelización de clientes.

De hecho, indicó que el margen de intereses de todo el sector bancario sufrirá una caída el año que viene, que estimó en un 25%, por lo que "no habrá mucho margen de sacrificio".

Finalmente, se refirieron a la participación de la entidad en Repsol y no descartaron que Caixa Catalunya pudiera venderla durante 2010 si alcanza una cotización "interesante porque no es estratégica para nosotros". Según concluyó Serra, "no hay prisa porque la venta a Mapfre nos da mucha tranquilidad y podemos esperar a que la ocasión de vender sea favorable".

(SERVIMEDIA)
08 Mar 2010
JBM/gfm