El Consejo Político de IU se reunió este sábado para poner fecha a esa Asamblea y organizar el proceso que dee comenzar de forma inmediata. El debate se prolongó a puerta cerrada durante más de siete horas después de sendas intervenciones en abierto del coordinador general, Cayo Lara, y del propio Garzón en calidad de candidato a la Presidencia del Gobierno.

El secretario de Organización, Adolfo Barrena, propuso formalmente celebrar esa Asamblea los días 20, 21 y 22 de mayo, aunque la repetición de las elecciones generales alteraría esa previsión. En ese caso, explicaron fuentes de la organización, se haría un paréntesis en el proceso para centrarse en la campaña electoral, y la preparación de la Asamblea seguiría después de los comicios.

CENSO DE MILITANCIA

Pese a la aprobación del proceso propuesto por Barrena (84 votos a favor, 11 en contra y 38 abstenciones), la Asamblea será convocada formalmente en otra reunión del Consejo Político el próximo 30 de enero por una cuestión técnica relacionada con el cierre del censo de militancia para la participación.

El proceso comenzará el próximo lunes con una consulta a la militancia de IU, que tendrá un mes para reunirse en asambleas se base y responder a un cuestionario que sirva para diagnosticar la situación de la organización y su opinión sobre los retos inmediatos.

No será formalmente una consulta vinculante, pero la previsión de la dirección de IU es que las conclusiones de esas asambleas de base sirvan para orientar la redacción de los documentos que se debatirán en la Asamblea: informe de gestión de la dirección saliente, documento político, organizativo y estatutos, entre otros.

CONTACTO CON OTRAS ORGANIZACIONES

Bajo la dirección de los órganos de dirección federales, la Comisión creada este sábado se encargará de preparar, desarrollar y ejecutar la Asamblea, dividida en grupos de trabajo: metodología, contactos con otras organizaciones, organización y logística, y diseño político y estrategia.

El Consejo Político aprobó la propuesta de creación de esa Comisión y de sus componentes, en su inmensa mayoría del PCE y afines a Garzón. Además de él mismo, estarán Clara Alonso, Marina Albiol, Adolfo Barrena, Marga Ferré, José Luis Centella, Lola Sánchez, Eva García Sempere, Sira Rego, Manuel Fuentes, Antonio Cortés y una persona en representación de las federaciones de Andalucía, Asturias, Navarra, y de Cataluña con EUiA. Tras el debate a puerta cerrada se decidió sumar a esa Comisión a Fernando Sánchez, Tasio Oliver, Encarna Milla y Juan Peña.

En el grupo de contactos con otras organizaciones estarán Garzon, Clara Alonso y Marina Albiol, los más partidarios de seguir intentando la confluencia. Formalmente su objetivo es “tejer, ampliar y diversificar la política de alianzas” mediante conversaciones permanentes con organizaciones políticas y sociales.

SIGNIFICADO DE LA COMISIÓN

El coordinador general, Cayo Lara, podrá asistir a las reuniones de la Comisión y de los grupos de trabajo aunque no tendrá voto en las mismas. En el debate a puerta cerrada se suscitaron todo tipo de interpretaciones sobre esa Comisión y el papel que jugará en paralelo a la dirección de la coalición hasta la Asamblea.

En el aire queda definir si esa Asamblea será una más de las ordinarias de Izquierda Unida o tendrá otra relevancia. De hecho, muchos en la dirección consideran que la creación de esa Comisión es en la práctica una forma de garantizar la suma de personas ajenas a la coalición con las que se pretende ampliar la Unidad Popular, y de asegurar que esa Asamblea supone la superación de la actual coalición.

Solo 151 de los 225 miembros del Consejo Político se habían acreditado para participar en la reunión, y fueron muchos menos los que votaron al finalizar el debate. El informe de Garzón, que había pedido expresamente repensar la organización para hacerla más ágil y seguir apostando por la confluencia fue respaldado por el 80% de los presentes.