Según comunicó la compañía a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), esta decisión contribuirá a "invertir la tendencia de pérdidas operativas y al reforzamiento de la posición competitiva de la compañía".

El proceso se justifica en causas "económicas, productivas y organizativas", estando prevista su implementación en la primera parte del año 2016 y supone la amortización de 120 puestos de trabajo adscritos a los centros en Madrid (Tres Cantos), Albacete y Canarias, distribuidos entre las actividades de ventas, marketing, planificación de la demanda, informática, financieras, contables y administrativas y actividades de soporte. Esta decisión no afecta a la actividad de almacén.

La reorganización será debidamente comunicada a los trabajadores de la compañía, iniciándose el preceptivo periodo de consultas y se acometerá de forma "responsable, ordenada y consensuada, y de conformidad con lo previsto en la normativa laboral".

Además, la compañía ha decidido suspender el pago del dividendo de 0,28 euros brutos por acción pendiente de reparto, por importe total de 3.620.724,80 euros. "Este dividendo se abonará en cuanto se cumplan las condiciones previstas en el contrato de financiación", subraya la compañía.