Esta primera cumbre entre la UE y Marruecos tendrá como anfitrión al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, en su calidad de presidente de turno,y contará también con el presidente permanente del Consejo, Herman Van Rompuy, y el presidente de la Comisión, José Manuel Durao Barroso. La delegación marroquí estará encabezada por su primer ministro, Abbas El Fassi.

La trascendencia de la cita se debe a que es la primera cumbre que la Unión Europea celebra con un país de la ribera sur del Mediterráneo y con un país árabe, y a que es un eslabón esencial en un proceso de acercamiento iniciado en 1960 y cuyo objetivo es que ambas partes compartan en un futuro "todo menos las instituciones".

La Unión Europea y Marruecos tienen uno de los diferenciales de renta más altos del mundo separados tan sólo por los 14 kilómetros que dista el país magrebí de España, país para el que esa relación tiene una especial trascendencia por los desafíos comunes a dos países vecinos y amigos.

La diplomacia español espera que esta cumbre sirva para dar un paso más en ese acercamiento, sobre la base de que Marruecos está inmerso en un proceso de reformas modernizadoras inspiradas por la proximidad de la Unión Europea, y desde la Unión Europea es necesario dar un respaldo expreso a esas reformas para proseguir con el acercamiento.

En el ámbito económico, por ejemplo, el objetivo es llegar a un espacio común con una integración cada vez más amplia entre ambos mercados y que ambos se regulen por las normas que imperan en el espacio comunitario.

Hay confianza, además, en que esa especie de círculo virtuoso que supone la relación entre la Unión Europea y Marruecos como motor de reformas tenga un efecto de cierta imitación en otros países del Magreb y de la ribera sur y oriental del Mediterráneo.

La relación "estratégica" con Marruecos se refleja en las perspectivas financieras de vecindad que la Unión Europea acaba de aprobar para el periodo 2011-2013, dotadas con 5.700 millones de euros de los cuales el 10% se destina a ese país, primer receptor de esas partidas por delante de Ucrania y Egipto.

Sobre la mesa de la cumbre estará el proceso de integración del Magreb, la puesta en marcha de la Unión por el Mediterráneo, el conflicto en Oriente Próximo, las relaciones entre la Unión Europea y África, las políticas migratorias, los derechos humanos, y también el contencioso del Sahara, además de asuntos globales como la crisis económica, el cambio climático o la Alianza de Civilizaciones.

La cumbre comenzará el sábado por la tarde con un encuentro de empresarios europeos y marroquíes que será clusurado por Rodríguez Zapatero y Durao Barroso, al que segurá una cena. El domingo será la jornada de trabajo político que concluirá con una declaración en la que se subrayará la consolidación de esa relación "estratégica".