Según esta organización, grandes inversores, entre ellos fondos de pensiones públicos, fundaciones y organizaciones religiosas, sometieron en 2009 a voto un total de 95 propuestas en este sentido en las juntas de accionistas de 82 empresas en las que invierten, lo que supuso un incremento del 40% con respecto al año precedente.

El incremento de dichas iniciativas está relacionado con el endurecimiento de las directrices y normativas sobre la información que las empresas deben hacer pública en relación con el cambio climático.

Entre las empresas a las que los inversores presentarán este año ese tipo de reivindicaciones se encuentran grandes compañías petroleras y mineras, eléctricas, constructoras e instituciones financieras, que los accionistas consideran no están informando adecuadamente sobre el impacto medioambiental de su actividad.

Este es el caso de las petroleras ExxonMobil y Conoco Phillips, empresas a las que sus accionistas pedirán en próximas juntas de accionistas que informen sobre el riesgo y el impacto medioambiental derivado de sus actividades de extracción de petróleo a partir de arenas bituminosas, una práctica con una huella de carbono muy superior a la extracción tradicional de petróleo.

También la eléctrica Southern Company, y productores de carbón como Consol y Massey, a los que los accionistas reclaman más información sobre las medidas que prevén adoptar para la reducción de gases de efecto invernadero anticipándose a la aprobación de normativas en esta materia.

En lo que va de 2010 estas actuaciones han logrado un total de 28 compromisos de actuación por parte de empresas como las mineras Alpha Natural y Foundation Coal, que han anunciado que reducirán sus emisiones de CO2, o International Paper y Weyerhaeuser, que se proponen combatir la deforestación.