Rajoy se expresó así en la conversación informal que mantuvo con los periodistas que cubren la caravana electoral del PP, tras subirse, por primera vez, a su autobús en la distancia que separa el aeropuerto de Santander, adonde llegó tras participar en Madrid en el funeral de Estado por los dos policías fallecidos en los atentados de Kabul (Afganistán), hasta el centro de la capital cántabra donde dio un paseo.

“La lección es que ha ganado la buena educación porque tiene que respetarse en cualquier circunstancia”, defendió Rajoy para asegurar que llamó a Sánchez “ruin”, “mezquino” y “miserable” porque, “cuando se produce una agresión de ese tipo", es "una expresión que te sale del alma” y porque “nunca espera eso de una persona”.

El cabeza de lista del PP se remitió a sus palabras en el cara a cara cuando dijo que “esta broma se ha acabado” y que “hasta aquí hemos llegado” porque, dijo, no tiene “por qué aguantar ese tipo de afirmaciones”. “Aquí cada uno dice las cosas como quiere, pero con mesura”, aseguró para reivindicar que “aunque a alguno le vayan mal las cosas se tiene que actuar con mesura”.

NO HUBO DEBATE

En la casi media hora de conversación con los periodistas, Rajoy, que admitió que “debate como tal no hubo demasiado”, defendió que “los debates no suelen cambiar mucho más cosas salvo que se produzcan acontecimientos tan poco habituales como ayer”.

Subrayó que, en su “modesta opinión, a Sánchez “no le puede beneficiar” el comportamiento del cara a cara. “A la inmensa mayoría le desagradan estos ataques", apuntó para admitir que en los 30 años que lleva en política "nunca había visto un ataque así".

En este sentido, el cabeza de lista del PP recordó haber celebrado dos debates electorales con José Luis Rodríguez Zapatero y Alfredo Pérez Rubalcaba, pero “no hay color”. “Se confrontaban ideas y pareceres y se respetaban pareceres”, afirmó.

“Una cosa es la crítica política y otra una agresión de ese tipo”, lamentó para apuntar que al resto de candidatos “nunca” les ha escuchado decir de él “unas cosas como las que ayer oímos”. “Y me han criticado, pero yo no me he metido ninguna persona, sólo defiendo mis posiciones”, afirmó para apuntar que él “ni siquiera nombra” a sus adversarios políticos.