El nuevo reglamento prevé que sean abonados los gastos que genere el traslado de aquellos diputados que no tengan o no puedan utilizar su vehículo propio y que acuden, por ejemplo, en taxi, pero puntualiza que, en ningún caso, este pago podrá exceder de los gastos que les corresponderían por la utilización de vehículo propio (0,25 euros por kilómetro). Será obligatoria la justificación documental previa.

Con la aprobación del documento, queda anulado el sistema basado en el pago automático, que se efectuaba a partir de los datos facilitados por cada diputado al inicio de la legislatura en una declaración jurada. Este modelo abría la puerta, por ejemplo, a que los parlamentarios pudiesen cobrar dietas por desplazamientos realizados en vehículos de otros compañeros cuando en realidad no habían afrontado el gasto.

Tras la reunión de la junta de portavoces de hoy, los tres grupos mostraron su satisfacción por la reforma del modelo, que busca poner fin a la polémica suscitada en las últimas semanas por cobros irregulares. El portavoz parlamentario del BNG, Carlos Aymerich, calificó la medida de "primer paso" y mostró su deseo de que "siga avanzando", porque "todo lo que suponga dar más garantías y transparencia es bueno".

Por su parte, el portavoz del grupo parlamentario socialista, Xaquín Fernández Leiceaga, resaltó que, con su firma, los diputados tendrán ahora una "mayor responsabilidad" en el proceso.

Desde el PPdeG, el portavoz del grupo parlamentario, Manuel Ruiz Rivas, reiteró la petición de que se remita una circular a los grupos en las que faciliten el acuerdo, para que tengan constancia de él los diputados.