Batet (PSOE) se distancia de la “izquierda voluntarista de la queja permanente”
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La dirigente del PSOE y número dos en la lista al Congreso por Madrid, Meritxell Batet, defendió este sábado los valores socialistas y los distanció de la “izquierda voluntarista de la queja permanente” que en la realidad “nunca cambia nada” y también del “cinismo” de quienes ahora hacen programas electorales “en serio, como si lo anterior hubiera sido una broma”.
Batet participó en un acto en la localidad madrileña de Alcalá de Henares junto al alcalde de la ciudad, Javier Rodríguez; la secretaria general de los socialistas madrileños, Sara Hernández; y el portavoz del PSOE en el Congreso de los Diputados, Antonio Hernando.
Aseguró que el PSOE está “en pie, dispuesto a gobernar” con los mismos valores de siempre. “Nosotros no cambiamos ni nos escondemos” porque entre esos principios está “en orgullo de ser socialistas, de nuestra historia, de quienes nos precedieron. Nosotros honramos a nuestros padres, a nuestros abuelos, no necesitamos renunciar absolutamente a nada”.
"CINISMO" DEL PP
“No somos los profesionales de la queja ni de la protesta continua. Esos nunca cambian nada”, dijo Batet, que criticó en varias ocasiones lo que considera “la izquierda voluntarista de la queja permanente” que cree, por ejemplo, que la desigualdad se puede combatir “por decreto.
Criticó también “el cinismo” de quienes ahora presentan programas electorales “en serio, como si lo anterior hubiera sido una broma, una broma de mal gusto para los ciudadanos”, en referencia al lema ‘Hablando en serio’ empleado por el PP en sus actos electorales.
Batet defendió que ha sido el PSOE el partido que “poco a poco” ha ido conquistando derechos y libertades para los ciudadanos, mejorando la calidad de vida de la mayoría y especialmente de los más desfavorecidos. Desde hace 136 años, afirmó, los socialistas defienden la tolerancia, la cultura y la libertad frente a quienes confrontan y fracturan; la convivencia frente al fanatismo; las oportunidades para todos y no “privilegios de unos pocos”; el feminismo frente a la “dominación”; a las personas frente a los nacionalismos “excluyentes”.
EL LEGADO DE PABLO IGLESIAS
Defendió el legado del fundador del PSOE, Pablo Iglesias, para dejar claro que los socialistas son partidarios de “reformar”, no de “destruir”; de aprender de todo lo que se puede mejorar en vez de aspirar a ser como “el primer hombre en la Tierra”; de “reparar” lo que no funciona pero no de “empezar de cero”.
Pasó de puntillas sobre el “problema de convivencia” en Cataluña para subrayar que el PSOE ha sido el único partido capaz de poner una solución sobre la mesa: una reforma de la Constitución para mejorar la distribución del poder y de las competencias garantizando la igualdad de todos los ciudadanos.
Criticó a esa “izquierda voluntarista” sin concretar siglas, pero sí mencionó expresamente a Ciudadanos cuando alertó de que nadie puede dar lecciones de democracia a quien ha luchado por ella desde el exilio. “¡Si la democracia de este país la pusimos nosotros en pie!”, exclamó.
Llamó a votar en las próximas elecciones generales al partido capaz de combatir de nuevo “las desigualdades, las injusticias, las discriminaciones y las humillaciones”, interpelando a un “cambio que une”.
(SERVIMEDIA)
28 Nov 2015
CLC/nbc