Explicó que la decisión de esta operación la tomó el Gobierno regional para “obtener ingresos y reducir gastos” en una etapa de gran crisis económica. Tras recordar que el Ivima ha vendido más de 70.000 pisos en toda su historia, negó que se hubiese producido un quebranto económico de 100 millones de euros con esta operación, como señala la Cámara de Cuentas.

González aseguró que esta operación “tenía sentido económico” y destacó que con el dinero obtenido con esa venta, “pudimos hacer más viviendas de promoción pública”.

Asimismo, indicó que “no ha habido ningún quebranto patrimonial ni afectación de los derechos” de los inquilinos y destacó que “todo se tramitó con absoluta transparencia, como han ratificado los tribunales de justicia”.

En la misma comisión de investigación sobre corrupción política en la Comunidad de Madrid durante los últimos ocho años también compareció el exconsejero de Vivienda en la etapa de esta venta de pisos del Ivima, Pablo Cavero.

Explicó que la venta de 32 promociones del Ivima se realizó en 2013, “en plena crisis económica, y afirmó que “vender en bloque”, en vez de una a una las 3.000 viviendas públicas, fue una decisión del Consejo de Gobierno.

“El motivo real de la operación fue obtener fondos para seguir construyendo más vivienda social”, manifestó Cavero, quien señaló que “todo se realizó con total transparencia”.

También comparecieron Fernando Gumuzio Íñiquez de Onzoño, socio fundador del Grupo Azora, y Francisco Javier Carmena, expresidente de la mesa de contratación de la citada venta de pisos del Ivima.