La petrolera destacó que la fortaleza del modelo integrado del grupo le permitió mejorar los resultados en un entorno marcado por la caída del 50% en los precios del crudo.

El resultado neto (MIFO) ascendió a 832 millones, lo que supone un retroceso del 49,5% respecto a los 1.646 millones del mismo período de 2014, afectado muy directamente por la caída del precio del crudo, que incidió en un menor valor de los inventarios (en 329 millones) y en el resultado negativo no recurrente de 238 millones derivado fundamentalmente de provisiones extraordinarias realizadas en el periodo.