En una entrevista en la Cadena Cope, recogida por Servimedia, el ministro explicó que en esa misiva, en la que se abordaba el tema de la pobreza, se recogían “juicios muy peyorativos” dirigidos a “un país próximo y aliado”.

Ante esta situación, Margallo explicó que le pidió que omitiera dichos calificativos, ya que “para hablar de pobreza no era necesario dar estacazos a nadie”.

Finalmente, decidió no incluir la carta en el libro porque “con mi nombre en la portada se podían dañar los intereses de España”. “Una pena, porque contenía contrapuntos sobre mi punto de vista, lo que la hacía interesante”, dijo.