Según informaron fuentes socialistas, ambos han quedado en "mantener una vía directa de diálogo". Desde el PSOE insisten en que su propuesta para afrontar el desafío soberanista en Cataluña es “clara: ley, diálogo y política”.

Sánchez hizo referencia durante su visita a Portugalete (Vizcaya) a esta cuestión y afirmó que “ante el antidemocrático pulso de los secesionistas en Cataluña” los españoles y los catalanes deben “confiar en las fortalezas de nuestro país”. Asimismo, se mostró convencido de que al secesionismo se le ganará "con la fuerza de la ley, de los votos y de la política, con los argumentos de la convivencia y del diálogo", por lo que pidió "confianza, porque la crisis en Cataluña, con la ley, con los votos y la política tiene solución".

En esta línea, recordó que el PSOE, ante el desafío territorial, apuesta por una reforma de la Constitución porque el desafió de la “convivencia” tiene “mucho” que ver con el actual marco legal. Dicha propuesta de reforma de la Carta Magna la presentará mañana el propio Sánchez.

En la reforma, según Sánchez, “sin renunciar al reconocimiento de las singularidades” de territorios como el catalán o el País Vasco, se busca “reforzar los elementos que garantizan la igualdad entre españoles”. “Lo hacemos para articular y garantizar mejor la unidad de España”, apostilló el líder socialista.

REFORZAR AUTOGOBIERNO

Dicha propuesta, señaló Sánchez, seguirá “claramente apostando por el reforzamiento y la profundización de países y territorios que tienen una vocación de autogobierno, como el País Vasco”.

Además, Sánchez aprovechó para arremeter contra los casos de corrupción de CDC y del presidente Artur Mas y le pidió que deje de “articular discursos victimistas” y dé la cara, “explicaciones” y asuma en “primera persona” esta situación.