López-Istúriz confió en que este episodio "haga reflexionar de una vez por todas al régimen cubano", ya que considera que es "urgente" que el gobierno de la isla empiece a respetar los derechos humanos de los cubanos.

Como gesto de buena voluntad, reclamó a Fidel y Raúl Castro que liberen "a los presos condenados durante la primavera de 2003, colectivo del que formaba parte Zapata".

A su juicio, el Gobierno español y el presidente de turno de la Unión Europea "debería replantearse sus relaciones con el régimen" tras este hecho, con el que aseguró que se demuestra "el fracaso del Gobierno de Zapatero" en sus gestiones por llevar la democracia al país caribeño.

“El presidente Rodríguez Zapatero, que hoy asiste a un Congreso contra la pena de muerte, debería preocuparse también de esas condenas silenciosas que se producen cada día en Cuba y por tanto abandonar de una vez por todas la idea de modificar la Posición Común de la UE sobre Cuba durante este semestre”, concluyó.