Quiroga dimite al frente del PP vasco pese a que la dirección nacional le pidió que siguiera

- El PP vasco puede elegir a su nuevo presidente a través de una gestora o una Junta Directiva regional

- El nuevo líder será el tercero en cuatro años y deberá preparar las elecciones a lehendakari de 2016

MADRID
SERVIMEDIA

Arantza Quiroga dimitió este miércoles como presidenta del PP vasco pese a que la dirección nacional del partido le expresó su respaldo en varias ocasiones durante la última semana y le pidió expresamente que continuara en el cargo.

Así lo confirmaron varias fuentes de la dirección nacional del PP consultadas por Servimedia que insisten en que Quiroga contaba con el respaldo de Génova después de retirar el pasado miércoles una iniciativa en el Parlamento vasco para crear una ponencia sobre paz en la que proponía un diálogo entre todos los partidos, incluido EH Bildu.

En este sentido, las fuentes reconocen que la semana pasada se le planteó a Quiroga que reflexionara en los días de puente sobre la conveniencia de su continuidad antes de la reunión a la que se emplazó para este martes en Madrid con la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal.

De hecho, el vicesecretario general de Sectorial del PP y dirigente vasco, Javier Maroto, insistió en varias ocasiones en los últimos días que Quiroga contaba con el respaldo de la dirección nacional y Cospedal reafirmó ayer mismo por la mañana desde Bruselas que el futuro de Quiroga pasaba por continuar siendo presidenta del PP vasco.

En este sentido, en público y en privado desde Génova respaldaron el hecho de que Quiroga optara por retirar el pasado miércoles la moción que había presentado en Vitoria después de que EH Bildu intentara utilizarla para "blanquearse", en palabras de Maroto.

Argumentan en el PP que la hasta hoy presidenta del PP vasco estuvo "rápida" y "ágil" evitando que los abertzales se aprovecharan de un texto que hoy Quiroga insistió en que volvería a presentar "una y mil veces".

CRÍTICA A LAS FORMAS

Sin embargo, reconocen que las informaciones apuntaron a que la retirada respondió a una desautorización de Génova sin ser así y, sobre todo, a las críticas de las asociaciones de víctimas del terrorismo, respaldadas por el sector más conservador del PP, que dañaron a la presidenta del PP vasco en un mandato difícil desde el primer momento en clave interna.

Un parlamentario del PP vasco de larga trayectoria nacional rechazaba ayer que Quiroga tuviera que dimitir por la iniciativa de paz porque, defendía, la "deslegitimación" en el partido siempre se ha entendido como "la condena y la repudia social al terrorismo".

Sin embargo, las formas de Quiroga sí fueron comprendidas por algunos, pero muy criticadas por la mayoría de sus compañeros. La voz más sonada fue este lunes la del presidente del PP de Guipúzcoa, Borja Sémper, que admitió que cuando un político "recibe un portazo" no es "el momento de desaparecer", sino de "insistir". Admitió que le producía "vergüenza ajena" el "espectáculo" que ha dado el PP vasco en los últimos días.

DIVISIÓN INTERNA

Con todo, en el PP nadie pasa por alto un secreto a voces que explica en mayor medida la debilidad que Quiroga ha manifestado en los últimos días: la lucha interna en el PP vasco.

En los últimos meses ha sido manifiesto el frentismo entre la dirección de Quiroga, elegida en un XIV Congreso del partido en marzo de 2014 con un 72,8% de los votos, y el PP de Álav" que encabeza su presidente regional y ministro de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, Alfonso Alonso, y que apoya el exalcalde de Vitoria y hoy vicesecretario general del PP, Javier Maroto.

El Congreso que se celebró en San Sebastián puso de relieve las divisiones internas porque vino precedido de un mes de tensiones entre Quiroga y Alonso, a raíz de la salida de Iñaki Oyarzábal de la Secretaría General del PP vasco, que fue sustituido por Nerea Llanos, vizcaína y hasta hoy 'mano derecha' de Quiroga.

SUSTITUTO DE QUIROGA

En relación al escenario que se abre este miércoles en el PP vasco tras la dimisión de Quiroga, en la dirección nacional evitan adelantar cómo se llevará a cabo la transición en el partido y quién será la persona encargada de liderarla.

A este respecto, varias fuentes consultadas reconocen que a poco más de dos meses de las elecciones generales del 20 de diciembre, la posibilidad de que se celebre un congreso extraordinario para elegir al sucesor de Quiroga no es un planteamiento que, a día de hoy, esté sobre la mesa.

Ya en los casos de relevo de Alberto Fabra en Valencia y de José Ramón Bauzá en Baleares se descartó esta opción que Bauzá planteó públicamente y se optó por una solución más rápida y que ayudó a cerrar filas en pocos días.

La dirección nacional trasladó a las regionales que los congresos sólo se celebrarían después de las generales y tras el Congreso Nacional que ratificará o elegirá sucesor de Mariano Rajoy en función de lo que ocurra el 20-D.

En este sentido apuntan a que las opciones serían dos: la constitución de una gestora como ocurrió en Navarra o la convocatoria de una Junta Directiva Regional para elegir sucesor, que podría ser o no de transición en función del apoyo que tenga de la dirección nacional.

URGENCIAS ELECTORALES

El PP vasco necesita resolver cuanto antes la crisis interna que deja Quiroga, especialmente a dos meses de las elecciones generales anunciadas para el 20 de diciembre, en las que Mariano Rajoy se juega la reelección al frente de La Moncloa.

Los comicios generales son también una cita clave para el PP del País Vasco, que en esta comunidad se juega revalidar los tres diputados que consiguió en 2011, de los 18 que se reparten en las tres provincias de Euskadi.

Además, los populares vascos afrontarán al año que viene unas elecciones autonómicas tras las celebradas en octubre de 2012. Entonces, con Antonio Basagoiti a la cabeza, el PP consiguió 10 parlamentarios regionales, tres menos de los que tenía hasta entonces.

Los comicios vascos del año que viene iban a ser los primeros de Arantza Quiroga como candidata a lehendakari pero, tras su dimisión, el PP debe elegir un nuevo líder que encabece la próxima lista electoral. Será el tercer presidente en apenas cuatro años.

(SERVIMEDIA)
14 Oct 2015
IRG/PAI