La OMS indicó que la nueva Agenda, que sustituye a los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM), “tiene un alcance y una ambición sin precedentes”, en el sentido de que se mantienen algunas prioridades como la erradicación de la pobreza, garantizar el acceso a la salud y a la educación, la seguridad alimentaria y la nutrición, e incluye una amplia gama de objetivos económicos, sociales y ambientales y se prometen sociedades más pacíficas e inclusivas.

El tercer ODS (“garantizar una vida sana y promover el bienestar para todos en todas las edades”) expresa, según la OMS, que “la salud es un bien que debe alcanzarse por el valor que representa en sí mismo”.

“El objetivo relativo a la salud incluye nuevas metas para cuestiones importantes en las que se lograron grandes avances en el marco de los ODM. Se han reducido las epidemias mundiales de tuberculosis y paludismo y la causada por el VIH. A nivel mundial, la mortalidad infantil y la mortalidad materna han disminuido drásticamente desde 1990, con descensos del 53% y el 40%, respectivamente”, explicó la OMS.

No obstante, esta agencia de la ONU indicó que “aún queda mucho camino por recorrer”. “A menudo, los informes sobre los progresos realizados a nivel mundial no reflejan las distintas velocidades con que avanzan los países y las regiones dentro de un mismo país. En la actualidad se reconoce la necesidad no solo de que las personas logren sobrevivir, sino también de que prosperen en la vida”, añadió.