García Albiol se expresó así tras visitar el mercadillo del barrio de Cerdanyola en Mataró (Barcelona) después de que ayer la banca advirtiera de que si Cataluña opta por la independencia reconsiderará su implantación en ese territorio porque entiende que el sector financiero se vería obligado a afrontar graves problemas de inseguridad jurídica por la exclusión de la UE y del euro.

“Que diga que se tiene que pasar por encima de los poderes financieros, lo podría suscribir Maduro o el mismo Pablo Sánchez... Pablo Iglesias”, se corrigió García Albiol tras atribuir al líder de Podemos el apellido del secretario general del PSOE, Pedro Sánchez.

El candidato del PPC lamentó que las declaraciones de Mas son “un insulto al sentido común” y puso el acento en que el líder de CDC “se ha dedicado a fomentar los ‘lobbies’ y negocios”. “El aún presidente tiene la desfachatez y la poca vergüenza de hacer afirmaciones que son un auténtico peligro para la convivencia y para aquellas personas que tienen sus ahorros”, avisó.

“No es de recibo que mientras cajas y bancos, por primera vez en la historia, se pronuncian de manera clara sobre lo que significaría la independencia haga afirmaciones más propias de revolucionarios centroamericanos que no de un dirigente europeo”, lamentó.

"SINÓNIMO DE CORRALITO"

García Albiol, que criticó que Mas “ha perdido el norte” y “no merece la confianza ni seguir al frente del Gobierno ni un minuto más”, pidió al presidente de la Generalitat que “se relaje” y “que no haga más daño a Cataluña y a los catalanes”.

A este respecto, el dirigente popular subrayó que el aviso de la banca “ha puesto en evidencia que votar independencia es sinónimo de corralito”. “Significa votar para tener todos los números para perder los ahorros que tenemos en las cuentas de los bancos y las personas que son pensionistas no merece a estas alturas correr riesgos”, dijo para equiparar la situación a Grecia.

“Como no me lo imagino, pido un voto fuerte en contra”, apuntó para incidir en que no se está hablando de “una cuestión política”, “sino de la seguridad de los ahorros de millones de catalanes y pensionistas que se quieren poner en riesgos”.