Biodiversidad

Unas 50.000 especies de animales y plantas cubren las necesidades de miles de millones de personas

- Uno de cada cinco humanos depende de ellas para alimentarse y obtener ingresos, según un informe avalado por la ONU

- Más de 10.000 especies son explotadas para la alimentación humana y 2.400 millones de personas necesitan madera como leña para cocinar

MADRID
SERVIMEDIA

Alrededor de 50.000 especies silvestres de animales y plantas satisfacen las necesidades de miles de personas en todo el mundo, unas 10.000 de ellas como alimento, en tanto que cerca de 2.400 millones de seres humanos necesitan madera como leña para cocinar.

Esa es una de las conclusiones de un informe de evaluación de la Plataforma Intergubernamental sobre Biodiversidad Biológica y Servicios de los Ecosistemas (Ipbes, por sus siglas en inglés), que es el organismo científico equivalente al Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC, en inglés) en cuestiones relacionadas con los recursos naturales y que cuenta con el aval de Naciones Unidas.

Miles de millones de personas, tanto en países desarrollados como en países en desarrollo, se benefician a diario del uso de especies silvestres para alimentación, energía, materiales, medicamentos, actividades recreativas y otras contribuciones que son fundamentales para el bienestar de los seres humanos.

En vista de que un millón de especies de plantas y animales se encuentran en peligro de extinción, la aceleración de la crisis mundial de biodiversidad pone en riesgo las maneras en que las personas se benefician de las especies silvestres, según Ipbes.

El informe, dado a conocer este viernes, ofrece perspectivas, análisis y herramientas para establecer un uso más sostenible de las especies silvestres de plantas, animales, hongos y algas de todo el planeta. Se da un uso sostenible cuando la diversidad biológica y los ecosistemas se mantienen en funcionamiento mientras contribuyen al bienestar de los seres humanos.

CUATRO AÑOS

El documento es el resultado de cuatro años de trabajo realizado por 85 expertos en ciencias naturales y sociales, poseedores de conocimientos indígenas y locales, así como de 200 colaboradores, los cuales se apoyaron en más de 6.200 fuentes. El resumen del informe ha recibido esta semana el visto bueno de los representantes de los 139 Estados miembro de la Ipbes en Bonn (Alemania).

“Alrededor de 50.000 especies silvestres son usadas de diferentes maneras, entre las cuales se incluyen más de 10.000 especies que se utilizan directamente como alimento humano. Las poblaciones rurales de los países en desarrollo son las más expuestas por el uso insostenible, ya que la ausencia de alternativas complementarias suele obligarlas a seguir explotando especies silvestres que ya se encuentran en riesgo”, afirmó Jean-Marc Fromentin, que copreside la evaluación junto a Marla R. Emery y John Donaldson.

Emery apuntó que “el 70% de las personas pobres en el mundo dependen de las especies silvestres”. “Una de cada cinco personas depende de plantas, algas y hongos silvestres para obtener alimento y generar ingresos; 2.400 millones utilizan madera como leña para cocinar, y de los 120 millones de personas que trabajan en la pesca de captura, alrededor del 90% se gana la vida con la pesca en pequeña escala”, resumió.

Sin embargo, el uso habitual de especies silvestres no solo es extremadamente importante en los países pobres. “Desde el pescado que comemos hasta los medicamentos, los cosméticos, los objetos de decoración y las actividades recreativas, el uso de especies silvestres es más común de lo que la mayoría cree”, añadió Emery.

El uso de especies silvestres es una importante fuente de ingresos para miles de millones de personas en el mundo. Dos tercios de la madera en rollo industrial en el ámbito mundial proviene de especies de árboles silvestres; el comercio de plantas, algas y hongos silvestres constituye una industria de miles de millones de dólares e incluso los usos no extractivos de estas especies suponen un gran negocio.

El turismo basado en la observación de especies silvestres es uno de los principales motivos por los que, antes de la pandemia de covid-19, las zonas protegidas de todo el planeta recibían anualmente un total de 8.000 millones de visitantes y generaban 600.000 millones de dólares (más de 590.000 millones de euros).

PRÁCTICAS Y USOS

En el informe se identifican cinco categorías generales de ‘prácticas’ en el uso de especies silvestres: pesca, recolección, tala, captura de animales terrestres (incluida la caza) y practicas no-extractivas como la observación.

Para cada práctica, se examinan ‘usos’ específicos -como alimento humano y alimento animal, materiales, medicamentos, energía, actividades recreativas, ceremonias, aprendizaje y decoración- y se proporciona un análisis detallado de las tendencias en cada uno de estos usos durante los últimos 20 años.

En la mayoría de los casos, aunque el uso de especies silvestres ha aumentado, su sostenibilidad ha variado, lo que ocurre, por ejemplo, con la recolección con fines medicinales o la tala para obtener materiales y energía.

“Las últimas estimaciones mundiales confirman que el 34% de las poblaciones de peces marinos silvestres están sobreexplotadas, mientras que el restante 66% se pesca de manera sostenible”, indicó Fromentin.

No obstante, existen variaciones locales y contextuales. “En los países con una sólida gestión de la pesca se han registrado aumentos en estas poblaciones. Por ejemplo, se ha logrado reponer la población de atún rojo del Atlántico, que ahora se pesca dentro de niveles sostenibles”, subrayó Fromentin.

Este investigador apuntó, sin embargo, que “muchas pesquerías de pequeña escala son insostenibles o solo parcialmente sostenibles, especialmente en África para la pesca continental y marina, y en Asia, América Latina y Europa para la pesca costera”.

“La sobreexplotación es una de las principales amenazas para la supervivencia de muchas especies silvestres terrestres y acuáticas”, afirmó Donaldson, quien agregó: “Abordar las causas del uso insostenible y, siempre que sea posible, revertir dichas tendencias, brindará resultados positivos para las especies silvestres y las personas que dependen de ellas”.

TALA Y CAZA

Por otro lado, la supervivencia de cerca de un 12% de las especies de árboles silvestres está en riesgo debido a la tala insostenible. La recolección insostenible es una de las principales amenazas para varios grupos de plantas, en particular los cactus, las chicharras o cigarras y las orquídeas, y la caza insostenible se ha identificado como una amenaza para 1.341 especies de

mamíferos silvestres.

En el informe también se aborda el uso y el comercio ilícito de especies silvestres, ya que se da en todas las prácticas y suele traducirse en un uso insostenible. Los autores concluyen que ello constituye la tercera clase de comercio ilícito más importante, con valores anuales estimados de hasta 199.000 millones de dólares (196.000 millones de euros). La madera y los peces representan el mayor volumen y valor del comercio ilegal de especies silvestres.

También se alude al uso de especies silvestres por parte de los pueblos indígenas y las comunidades locales, así como su amplio conjunto de conocimientos, prácticas y creencias sobre este uso.

Los pueblos indígenas gestionan la pesca, la recolección, la explotación de animales terrestres y otros usos de las especies silvestres en más de 38 millones de kilómetros cuadrados de terreno en 87 países, lo que equivale a alrededor de un 40% de las zonas terrestres conservadas.

Para concluir, el informe examina posibles escenarios futuros con relación al uso de especies silvestres, que confirman que es probable que el cambio climático, el aumento de la demanda y los avances tecnológicos presenten desafíos significativos para el uso sostenible en el futuro, ya que aumentarán la eficiencia de numerosas prácticas extractivas.

(SERVIMEDIA)
08 Jul 2022
MGR/gja