El profesor Cañibano, que participó en una jornada sobre la colaboración de la empresa en la formación práctica de los estudiantes universitarios, precisó que esta cifra es "muy baja" si se compara con la de otros países europeos y añadió que la distribución territorial no es homogénea, porque la mayoría de las empresas que ofertan estas plazas en prácticas están ubicadas en Madrid y Barcelona.

En la misma jornada, el rector e la Universidad de Navarra, Alejandro Llano, señaló que la aguda crisis económica que padece el país plantea la posibilidad de rectificar los planteamientos "prestando un mayor interés a la investigación y la educación superior".

En su opinión, las universidades aparecen "como puntos neurálgicos del desarrollo, porque en ellas se gesta el conocimiento nuevo y se preparan profesionales capaces de enfrentarse con problemas inéditos que no cesan de proliferar y a su vez las empresas han de convertirse e instituciones donde la investigación y la formación han dejado de ser un adorno o una autojustificación, para convertirse en factores estratégicos de los que depende su propia supervivencia".

Para el rector Llano, el objetivo fundamental de la educación no es ya la transmisión de unos contenidos, sino la formación "de un tipo de persona capaz de pensar por sí misma y de embarcarse, junto con otras personas, en empresas de incremento del saber, en auténticos procesos de investigación".

Diversos epresarios españoles expusieron en la jornada su experiencia en la formación de universitarios como futuros cuadros directivos para sus empresas y coincidieron al afirmar que las prácticas de colaboración adquirirán un desarrollo importante en los años 90.