La mitad de esos niños y adolescentes, un total de 245, conviven en grupos de unas 8 personas en 28 hogares familiares, de los cuales 11 y 7pertenecen a las asociaciones privadas concertadas "Nuevo Futuro" y "Mensajeros de la paz", respectivamente, y 10 dependen directamente del Gobierno foral.

Desde hace más de una década, esos hogares con funciones educativas procuran asimilarse en el mayor grado posible a una familia normal, a la vez que tratan de desmasificar la atención a los muchachos necesitados.

Por otra parte, cuando el mantenimiento del menor en su hogar natural es imposible o resulta más negativo que un desarraigo temporal el INBS procura su acogimiento en una familia sustituta, en la que el niño o niña se integra como un hijo más.

No se trata de una adopción y la labor de las familias que acogen al menor no recibe compensación económica, salvo que carezcan de recursos suficientes. En 1991, 120 menores se beneficiaron de un acogimiento en un total de 96 familias.

Otra modalidad de asistencia del Gobierno navarro es el apoyo económico para el mantenimiento del niño en su hogar, donde la raíz del problema puede ser conómica, enfermedad, ausencia de uno de los padres, desavenencias entre ellos, etc.

Generalmente, la atención en esos casos corresponde a los Servicios Sociales de Base, de ámbito municipal. Las actuaciones varían según el problema y la necesidad: en algunos casos basta una ayuda económica para el comedor escolar y, en otros, el INBS proporciona apoyo externo en forma de una empleada que atiende a los menores. El año pasado recibieron esta clase de asistencia 25 familias en situación de grave necesidd, que llegó a 53 niños y niñas.

Además, para aquellos casos de bebés o niños de corta edad que necesitan una acogida urgente, el Gobierno navarro cuenta con un centro, el Chalet Argaray, que el pasado 31 de diciembre albergaba a 9 criaturas.