Sáenz de Santamaría realizó estas declaraciones en una entrevista en la Cadena Ser, recogida por Servimedia, en la que defendió el espacio Schengen y aseguró que en los Ministerios de Trabajo e Interior han detectado un "crecimiento exponencial" del número de solicitantes de asilo en España.

“Entre reubicados y reasentados, los que están en condición de asilados en otros estados y los que llegan, creo que son más de 2.000, dos mil y algo".

La Comisión Europea pidió a España el pasado mes de julio que acogiera a 4.288 personas en dos años, pero el ministro de Interior, Jorge Fernández Díaz, aceptó hacerse cargo de 1.300 refugiados.

La ‘número dos’ del Gobierno adelantó que España va a hacer “un esfuerzo similar”, “un poquito más”, al que hace Polonia en esta materia.

Sáenz de Santamaría defendió que España realiza un “esfuerzo importante" con los inmigrantes que llegan en situación irregular. “Hay estados que, básicamente, dedican su atención a la acogida de refugiados y asilados”, trasladó preguntada por si la capacidad de asilo no puede ser mayor.

“Nuestras capacidades de acogida están muy saturadas porque acogemos a inmigrantes en situación irregular”, remarcó para apuntar a la frontera sur y a la capacidad de acogida de Ceuta y Melilla.

La vicepresidenta del Gobierno abogó por un fondo de cooperación para tener “capacidad, fondos y dinero disponible para poder actuar en el origen”. Al mismo tiempo, defendió el espacio Schengen y que con la libertad de fronteras “se pueden hacer muchísimas cosas”.

TARJETA SANITARIA

Preguntada por si fue un error quitar la tarjeta sanitaria a los inmigrantes en situación irregular y su posible restitución, Sáenz de Santamaría emplazó a la reunión que este miércoles mantendrá el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, Alfonso Alonso, con las comunidades autónomas.

“Cuando pusimos en marcha el sistema, teníamos que cumplir la normativa comunitaria”, afirmó para defender que la asistencia de urgencias siempre se ha dado a los 'sin papeles'

Sin entrar en detalles, abogó por “articular un sistema” que permita “conjugar” derechos. “No hay ningún estado en la UE que conceda tantos derechos y atención sanitaria”, reivindicó.