Según informó hoy la Comunidad de adrid, hacia la medianoche una mujer acudió a las dependencias policiales en estado de ansiedad y explicó que ella y sus cuatro hijos

habían sido retenidos en su casa por su marido y que ella había podido escapar.

Los policías, al ver los hematomas que presentaba, solicitaron asistencia sanitaria y la presencia de una patrulla especializada de la Unidad de Protección de la Familia de Policía Municipal, para activar el protocolo de violencia de género. Según la mujer, estas agresiones se producían de manera habitual sobre ella y sobre los pequeños, especialmente sobre su hija de 7 años.

Dos patrullas se desplazaron a la vivienda para detener al agresor y solicitaron al mismo tiempo un mandamiento judicial a través del Cuerpo Nacional de Policía para poder acceder al domicilio.

Los agentes, que lograron entrar en la vivienda justo cuando el padre estaba agrediendo a uno de los menores, que además usó como escudo, consiguieron arrestar al individuo sin que el hijo sufriera daños. Los servicios sanitarios asistieron a los cuatro hijos y la madre se hizo cargo de ellos.