Cataluña. Margallo lamenta que el proceso independentista fragmente a la sociedad catalana

- El ministro considera “chocante” ver a un convergente votar una lista “encabezada por un comunista”

MADRID
SERVIMEDIA

El ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación, José Manuel García-Margallo, aseguró este jueves que la decisión del Gobierno presidido por Artur Mas de “someter” a los catalanes a una pregunta “tan relevante como la que quiere plantear fragmenta a la sociedad catalana”.

Así se pronunció Margallo en la rueda de prensa posterior a la sesión de apertura de la Reunión de Alto Nivel sobre Diálogo Intercultural e Interreligioso que tiene lugar hoy en Barcelona, en referencia a los últimos movimientos que han tenido lugar en el proceso independentista catalán y cuyo máximo exponente es la lista ‘Junts pel sí’, encabezada por el exeurodiputado de ICV Raül Romeva.

En ese sentido, el ministro aseguró que la primera obligación de un gobernante es dar “seguridad a las personas en cuyo nombre actúa y la primera seguridad es el cumplimiento y el respeto de la ley. Esto es la clave de la democracia”.

Del mismo modo, Margallo enumeró como la segunda obligación de todo gobernante “respetar el contrato social que subyace a cualquier formulación política”.

Esto le sirvió para expresó su “preocupación” por el hecho de que el Ejecutivo de Artur Mas haya decidido “someter” a los catalanes “a una pregunta tan relevante como la que quiere plantear y que fragmenta a la sociedad catalana”.

Por otra parte, Margallo mostró su inquietud por el hecho de que CiU “ha perdido la centralidad política”, ya que esta formación fue un “elemento clave en la estabilidad política de Cataluña y España, porque se entendía con todas las fuerzas políticas en Cataluña y en el resto de España”. Además, dijo que es “chocante” llegar a ver a una convergente votar una lista “encabezada por un comunista”.

Por último, Margallo manifestó su preocupación por la “fragmentación” entre “Cataluña y las otras Españas y la fragmentación en la sociedad catalana”. En este punto, recordó las palabras que pronunció ayer en Madrid el exministro de Asuntos Exteriores ruso Igor Ivanov, quien reconoció que cuando se fragmentó la URSS tenía que pedir un pasaporte para ir a visitar a su familia en Georgia.

“Me entristecería mucho que esa situación se produjera en Cataluña después de cinco siglos de convivencia”, concluyó.

(SERVIMEDIA)
23 Jul 2015
MST/caa