Los ingresos totales del grupo entre enero y junio fueron de 609 millones de euros, un 4,6% inferiores a los obtenidos un año antes. En concreto, los ingresos regulados se situaron en 577,8 millones, tras caer un 6,8%.

Desde Enagás indicaron que “es importante destacar el impacto de la reforma regulatoria por importe de 59,6 millones de euros, que ha sido compensado en parte por la contabilización de 8,6 millones de euros de ingresos adicionales por reconocimientos pendientes”.

Por su parte, el resultado bruto de explotación (Ebitda) se redujo un 9,6%, hasta situarse en 458,8 millones en el primer semestre.

La demanda del mercado nacional alcanzó 161,353 gigavatios hora (GWh), un 5,3% superior a la alcanzada en el primer semestre de 2014. La demanda del sector convencional creció un 2,1%, mientras que la demanda para generación eléctrica aumentó un 24,5%.

Las inversiones ascendieron a 280,3 millones de euros, de los cuales 137,7 millones fueron invertidos en España y 142,6 millones en la actividad internacional.

Mientras, el endeudamiento financiero neto de la compañía se situó en 3.850,8 millones en junio, por debajo de los 4.059,1 millones en que cerró el año 2014.