Según explicó a Servimedia la portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), Ana Casals, esto se debe a la entrada de una vaguada procedente de Portugal, que enfriará las capas medias de la atmósfera (a unos 5.000 metros de altura) y que provocará inestabilidad y un ligero descenso térmico.

Así, hoy se producirán las primeras tormentas en puntos de los sistemas Ibérico y central y del Cantábrico Oriental, que mañana viernes serán más generalizadas.

Según la Aemet, la declaración de ola de calor se dará por concluida mañana, aunque la próxima semana podría llegar una nueva a la Península.

De hecho, comunidades como la Rioja, Navarra o Asturias han experimentado este jueves una subida de sus mercurios, hasta rondar los 37 grados.

Ya el viernes, el descenso térmico será apreciable en Castilla-La Mancha, Madrid y Extremadura, que hoy también han alcanzado en muchos puntos los 40 grados.

El sábado comenzará refrescar en Cataluña, el valle del Ebro y puntos del Levante, mientras que el domingo volverán a subir las temperaturas y el lunes podría declararse una nueva ola de calor.