Griñán reconoce en una entrevista en el malagueño ‘Diario Sur’ recogida por Servimedia que renuncia ahora a su escaño como senador “por ser ayer el día siguiente a la toma de posesión de Susana Díaz como presidenta de la Junta”. Este lunes registró su renuncia en la Cámara Alta como senador por designación autonómica del Parlamento andaluz días antes de que se nombre a los nuevos senadores por parte de la Cámara andaluza.

“El domingo ya sabía que era mi último día como senador, y en el mismo momento en que tuve la alegría de verla acceder al cargo decidí claramente presentarme hoy (por el lunes) en el Parlamento andaluz, temprano, por la mañana, y hacer efectiva mi renuncia.”

El exmandatario andaluz apunta que “hacerlo antes no era correcto” pese a reconocer que la situación es “bastante insoportable”, no tanto por él, como por su familia. “No tengo que estarles sometiendo a penas de telediario a mis hijos”.

En este sentido, Griñán señala que “la cuestión es que es muy desagradable. Sobre todo porque nadie, nadie, podrá decir nunca ni de Manolo (Chaves) ni de mí que hemos hecho algo deshonesto en lo personal o familiar. Nadie lo puede decir”.

A este respecto, apunta que como “eso es tan claro y tan evidente”, le “duele no solamente que se nos haya jugado como moneda política sino que se nos haya utilizado por personas que saben quién soy”. De esta situación, Griñán añade que ha “aprendido muchas cosas”, ya que ha conocido a “muchas personas, algunas muy buenas dentro de los adversarios políticos, y otras miserables”.

Sin dar nombre concretos, llama “miserables a quien sabiendo que eres honrado dicen lo contrario por hacer daño. Quienes tienen el criterio de que es mejor restar votos al adversario que ganarlos para uno mismo. Yo creo que en política se está para ganar unas elecciones no para que las pierdan otros”.

SUSANA DÍAZ

Pese a que pueda parecer lo contrario, Griñán asegura que “todo el comportamiento” de Susana con él “ha sido amigable, incluso muy entrañable. Con ella no tengo más que una relación de agradecimiento”.

Preguntado por su frase al salir del Supremo “aquí pudo haber un gran fraude, pero no un gran plan”, reconoció que “fue una metedura de pata”. “Esa expresión fue desafortunada, lo reconozco”, añade.

Sobre si considera que ya ha pagado la pena política de sus hechos, señaló que ya se ha retirado de la política. “Desde hace unos meses he puesto fin a mi carrera. Hoy o mañana iré a pedir mi jubilación, a partir de ahora voy a ser un pensionista más”. “Responsabilidades políticas podemos tener las que queramos, pero es muy fuerte convertirlas en penales”, apunta el exmandatario andaluz.

Griñán reconoce “sinceramente” que no sabe de qué se le acusa ni qué ha hecho mal”.

Ante las pretensiones de los partidos que se apuntan el tanto de su renuncia, indicó que No voy a contestar a los partidos, porque esta es una decisión personal tomada con Susana Díaz.

NO DEJARNOS LLEVAR

Sobre la situación del partido sostiene que tiene “ahora mismo referencias en el partido, que son Susana, Pedro Sánchez, Javier Fernández, Emiliano García-Page, Guillermo Fernández Vara”.

Y, por último, considera que “si conservan la identidad del partido y nuestro espacio político las cosas irán muy bien. Lo que nunca deberemos hacer es dejarnos llevar y perder nuestras señas de identidad. Estoy convencido de que eso no va a pasar”.