El tema fiscal es uno de los puntos que separan el programa de Ahora Madrid y el PSOE, puesto que éste último abogó abiertamente por bajarlos, en particular el IBI, una rebaja que Carmona llegó a cuantificar y fundamentar en el ahorro de intereses que supondría renegociar los créditos para pagar la deuda.

Preguntados al respecto en la rueda de prensa conjunta en la que detallaron su acuerdo, Carmena reconoció que la prioridad de Ahora Madrid es garantizar los recursos de que dispone el Ayuntamiento para prestar servicios y hacer políticas sociales, pero aseguró que también se abre a la posibilidad de bajarlos si es posible.

Por su parte, Carmona, que sí mencionó la bajada de tasas municipales en su intervención inicial en la que enumeró los puntos de coincidencia con Ahora Madrid, reconoció que él sí es partidario de reducir los impuestos, pero avanzó que no urgirá a llevarlo a cabo en aras de la estabilidad del gobierno municipal.

En sus intervenciones iniciales, Carmena admitió que “hay cosas en las que podemos no coincidir, pero hemos querido reforzar lo que nos une”, en tanto que Carmona reconoció “disensos en algunas áreas”, entre las que evidentemente se encuentra el ámbito fiscal, aunque el concejal electo socialista no lo mencionó específicamente. Ambos prefirieron referirse a la importancia de un "cambio político de progreso" después de 25 años de gobiernos del PP.