Así lo confirmaron fuentes populares a Servimedia que apuntan a que las encuestas internas que maneja la formación en la semana final de campaña reflejan una subida en intención de voto del Partido Popular y del PSOE, frente a una caída de Podemos y Ciudadanos.

Los últimos sondeos con los que trabajan el PP y el sociólogo de cabecera de Rajoy, Pedro Arriola, invitan al optimismo en comparación con las semanas anteriores y así se lo ha hecho llegar Rajoy en las últimas horas a varios de los candidatos autonómicos. Está “tranquilo” y “confiado” en que el PP será el partido más votado el 24-M.

Las encuestas encargadas desde la calle Génova apuntarían a un afianzamiento del bipartidismo tradicional a medida que se acerca la fecha de las elecciones, así como a un retroceso del que algunos han bautizado ya como el nuevo bipartidismo.

Esta distancia entre PP y PSOE, por un lado, y Podemos y Ciudadanos, por otro, explicaría que el discurso de Rajoy en la primera semana de campaña se centrara en el ataque directo a los socialistas, más después de que el último barómetro del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) reflejara un empate técnico entre los dos grandes partidos.

MEJORA EN CAMPAÑA

Durante los siete primeros días de campaña, Rajoy no olvidó a las formaciones de Pablo Iglesias y Albert Rivera, pero fue este viernes, en la jornada ecuador, cuando se mostró más contundente en su crítica a las nuevas formaciones.

Advirtió de que “no es bueno ceder el voto a la incertidumbre, al azar o a cualquier estrella fugaz” porque, dijo, “éstas aparecen y desaparecen pero, mientras tanto, hacen mucho daño”.

Los últimos sondeos internos que maneja el PP también explican el estado de ánimo de Rajoy este viernes en su tierra. Primero, en un paseo distendido en Marín (Pontevedra) ‘escoltado’ por el presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez-Feijóo, y por la ministra Ana Pastor, reconoció estar “animado” porque el PP “va mejorando” en la campaña electoral.

En declaraciones a los periodistas, preguntado por Ciudadanos, admitió que no le da “miedo nadie” y se mostró confiado en que los votantes “van a responder” y van a apostar “por los valores seguros” que representa el PP.

Después, ante los suyos, en el mitin que clausuró en Vigo realizó su afirmación más contundente hasta el momento en campaña sobre el hecho de que el PP va a ganar las elecciones. “Toda España entera se va a llenar de los colores azul del PP”, pronosticó.

"DEPRESIÓN" POR EL CIS

Este soplo de optimismo en el PP en la recta final hacia el 24 de mayo contrasta con el estado de ánimo que el CIS dejó en muchos de los candidatos autonómicos la víspera de que arrancara oficialmente la campaña.

Algunos barones reconocen que el escenario dibujado por la encuesta oficial, que apuntaba a que el PP sólo obtendría la mayoría absoluta en Castilla y León y a que perdería Extremadura sin tener ni siquiera opciones de gobierno, causaron “depresión” en las filas populares. Incertidumbre y nerviosismo eran generalizados.

Sin embargo, ante ese contexto electoral, los barones no dudaban en trasladar a los suyos y a Rajoy, incluso en sus intervenciones en los mítines, que no se creyera las encuestas porque con el PP, por su voto oculto, siempre se equivocan.

El líder popular les respondía con confianza y, aseguran, más preocupados por los datos macroeconómicos de cada región y, en especial, por la evolución del desempleo, que por las encuestas. Está convencido de que los ciudadanos valorarán la gestión económica del PP a la hora de depositar la papeleta en la urna.

Con todos estos elementos sobre la mesa, fuentes de la dirección nacional del PP insisten en que Rajoy no tiene intención de dar un giro a la campaña en su última semana. Por el momento, está siendo una campaña sin grandes errores en las filas populares -frente al comentario machista de Miguel Arias Cañete que marcó la última campaña, los comicios europeos de 2014- y, también, sin sobresaltos que tengan que ver con casos de corrupción.

El presidente del Gobierno y del PP seguirá defendiendo la mejora de las cifras macroeconómicas y que éstas permiten dar sostenibilidad al Estado del Bienestar y tomar medidas como bajar los impuestos. Ayer, en una campaña de autonómicas y municipales, sorprendió sugiriendo una próxima bajada del IVA –de competencia estatal-después de que le traicionara "el subconsciente".