Ante el plenario del Comité Federal del partido –el máximo órgano del PSOE entre congresos- ensalzó la victoria en las elecciones andaluzas ante la mirada de la presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, y expresó que su “alegría” es la “todos los socialistas”. “El PSOE Andalucía ha demostrado ser un partido, un gran partido, un partidazo”, aseveró.

Señaló que los socialistas andaluces cosecharon una “victoria clara” para sacar adelante un “gobierno fuerte” centrado en los ciudadanos, por lo que ahora, tras los resultados, el PP tiene un “problema y el PSOE una oportunidad”.

A su juicio, “ganó Andalucía y empezó a ganar España” porque con la victoria del PSOE “quedó claro” que los socialistas son la “alternativa al PP”. Sánchez dijo que los populares “nos temen” porque los socialistas han demostrado ser los “únicos” que pueden ofrecer un “cambio seguro” porque “no parten de cero”.

EL PP TOCA A SU FIN

En esta línea, el líder socialista dijo que “sobran razones para poner fin a los gobiernos del PP” y que “lo saben los españoles y también lo saben en la calle Génova (sede del PP)”. Por ello, resaltó que “el tiempo del Partido Popular tocó a su fin y los españoles tienen más que argumentos para votar en contra del PP y votar a favor del PSOE”.

Sánchez estructuró todo su discurso contraponiendo las propuestas y las actuaciones del PSOE frente a las del Partido Popular, a la vez que reivindicando las diferentes entre ambos y que los socialistas son la alternativa a los actuales gobiernos populares. Y, aunque sin mencionar a otros partidos como Podemos, se erigió como “la única izquierda que puede gobernar”.

Y en este sentido, señaló que los socialistas presentan “propuestas ambiciosas pero realistas” y que “no vamos a proponer lo que quiere escuchar la gente sino lo que podamos cumplir”.

En esta línea de presentar al PSOE como el “cambio seguro” indicó que frente a una “derecha incapaz de renovarse a sí misma”, los socialistas han renovado un 84% las listas. Por eso insistió que el PP sabe que "tiene un problema", que no es sólo de liderazgo, de "corrupción sistémica" o de "fractura interna".

Volvió a reiterar su idea de que "no es la crisis, es la derecha y su modelo de sociedad" y anunció que "pronto", en “los próximos días” presentarán un Estatuto de los Trabajadores, medida que se comprometió a que impulsarán en cuando los socialistas lleguen al Gobierno, como una de las medida para complementaria a la derogación de la reforma y en las iniciativas en materia laboral, energética, fiscal y contra la pobreza social.

Sánchez ha dado además las gracias a los 62.000 candidatos socialistas que se presentarán a las próximas elecciones, en un total de 7.200 listas, con un 84% de caras nuevas. Se trata, ha dicho, de un "equipo unido, renovado para ponerlo al servicio de los españoles", “coherente y capaz” y al mismo tiempo "abierto y sólido, con capacidad de gestión y experiencia". Y destacó que “ todos” han firmado un "exigente compromiso ético", que sirve al compromiso con la regeneración política democrática del PSOE, un partido que tiene sus "cuentas claras, en A"., remachó.

Apeló al “orgullo” de ser socialista porque son el “partido que más se parece a España”. Concluyó su intervención con un mensaje de aliento: “Ánimo para trabajar, para ganar porque el futuro es nuestro”.