Nueve iraníes, en riesgo de ser ejecutados por las protestas tras la reelección de Ahmadineyad
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Amnistía Internacional ha instado a las autoridades iraníes a que no ejecuten a nueve personas condenadas a muerte y que fueron detenidas por las protestas que siguieron a la reelección presidencial de Mahmud Ahmadineyad del año pasado.
Esta organización teme que algunas o todas estas personas sean ejecutadas en público antes del 11 de febrero, 31º aniversario de la Revolución Islámica y fecha para la que se prevén nuevas protestas.
Además, el jefe adjunto judicial, Ebrahim Raisi, ha comentado que, tras ser ahorcados la semana pasada dos hombres arrestados por las protestas del año pasado, la ejecución de otras nueve personas se llevará a cabo "pronto".
La directora adjunta de Amnistía Internacional para Oriente Medio y Norte de África, Hassiba Hadj Sahraoui, afirmó que "los condenados no han tenido un juicio justo".
"Se les negó el acceso a un abogado en las etapas iniciales de su detención y algunos o todos parecen haber sido obligados a realizar confesiones. Tampoco está claro si los condenados han sido capaces de ejercer su derecho a apelar", apuntó.
Mohammad Ali-Reza Zamani y Arash Rahmanipour fueron ahorcados públicamente el pasado jueves tras ser declarados culpables de "enemistad con Dios" y de ser miembros del grupo terrorista Anjoman Padeshahi Iran (API). Según Amnistía, fueron las primeras ejecuciones conocidas que estuvieron relacionadas con la violencia postelectoral.
Las autoridades del país han afirmado que más de 40 personas murieron tras las elecciones en las manifestaciones, que fueron violentamente reprimidas por las fuerzas de seguridad, aunque Amnistía cree que el número es mucho mayor, y más de 5.000 fueron detenidas, muchas de las cuales fueron torturadas o maltratadas.
(SERVIMEDIA)
03 Feb 2010
MGR/lmb