La organización indicó en un comunicado que estas muertes son provocadas, entre otras causas, por las enfermedades diarreicas relacionadas con el uso de agua sucia, y recuerda que la falta de agua de calidad, potable y salubre agrava la pobreza de los países en desarrollo y afecta especialmente a la población infantil, al impedir su desarrollo físico e intelectual así como su acceso a la educación.

“El acceso al agua potable en una comunidad mejora de manera decisiva aspectos como la educación y la igualdad de género. Contar con un punto de agua cercano al hogar mejora los índices de asistencia al colegio, lo que además contribuye al cumplimiento de otro Objetivo del Desarrollo del Milenio, garantizar la educación primaria universal”, declaró la directora general de Plan Internacional, Concha López.

A este respecto, una de las metas fijadas en los Objetivos de Desarrollo del Milenio fue una cobertura del 89% de agua potable a nivel mundial, un compromiso que se alcanzó en 2012, aunque existen 45 países que no lo lograron, y se prevé que sus objetivos de saneamiento no se conseguirán hasta 2026.

La entidad recordó que recientemente construyó tres pozos de agua para los refugiados del campo de Melijo en Sudán del Sur, con el objetivo de que no tengan que caminar cuatro horas en busca del agua contaminada del río. Asimismo, instaló 56 letrinas para mejorar la higiene y el saneamiento y que ayudarán a prevenir enfermedades transmitidas por vectores, como la diarrea o la fiebre tifoidea.

Durante 2014, la ONG invirtió 42.435.000 euros en programas de agua y saneamiento, apoyó a 835.207 familias en la mejora de sus instalaciones de saneamiento y construyó 4.112 puntos de agua potable. Además, los programas de agua se extienden a proyectos para combatir enfermedades transmitidas por el agua y a intervenciones para promover el derecho de la infancia a la salud.