Un portavoz de los insumisos explicó hoy en rueda de prensa celebrada en Pamplona que, con su decisión de quebrantar la condena, pretenden forzar al Gobierno a dar una salida colectiva al conjunto de jóvenes que se niegan a prestar el servicio militar y la prestación social sustitutoria.

"Pretendemos reabrir el debate social y volver a colocar al Gobierno frente al problema que en verano creía haber apagado", señaló el representante delMovimiento de Objeción de Conciencia (MOC) tras enmarcar su postura "dentro de una sensibilidad social mucho más global y mayoritaria".

De momento, la mitad de los jóvenes de todo el Estado condenados por insumisión se han sumado a esta estrategia de negarse a acudir a la cárcel a pernoctar, tal como les obliga el tercer grado penitenciario.

Todos ellos han sido acogidos en sus domicilios por familiares, amigos o diferentes personalidades de la cultura y los movimientos sociales, que se han autoiculpado del delito de insumisión, solidarizándose con la campaña de desobediencia civil.

Asímismo, los insumisos de Pamplona iniciaron hoy un encierro en la parroquia de San Cristóbal de la capital navarra y han convocado a toda la sociedad a una manifestación que partirá el próximo sábado a las siete de la tarde de la Estación de Autobuses, en apoyo de sus tesis antimilitaristas.