Así lo anunció este lunes en rueda de prensa el presidente de la Interprofesional, Pedro Barato, para quien el esfuerzo realizado por el sector ha merecido la pena, en una "situación complicada" donde "apenas se sufragan los costes de producción".

El proyecto, que cuenta con un presupuesto de más de 16,5 millones de euros, se desarrollará en tres años en Francia, Reino Unido, Bélgica, Holanda y España, con estrategias de promoción diferenciadas para cada país.

En declaraciones a los medios, Barato afirmó que estos países son muy importantes para hacer que el aceite se conozca y se consuma, ya que son países donde "aún queda poder adquisitivo" a pesar de la actual recesión económica.

Los objetivos principales de la campaña son aumentar el consumo de aceite de oliva en los estados miembros que son "nuevos consumidores" de aceite, aumentar su presencia en los diferentes canales de distribución, informar a las personas responsables de la compra en el hogar, incorporar nuevos consumidores y promover hábitos de consumo saludable entre la población más joven.

La campaña, aprobada en octubre de 2009, está compuesta por acciones publicitarias dirigidas al consumidor y al distribuidor en los cinco países, y se difundirá a través de diferentes medios y soportes, como televisión, revistas, prensa gratuita e Internet.

Para la directora general de Industria y Mercados Alimentarios, Isabel Bombal, el "esfuerzo común" realizado en el sector del aceite para la puesta en marcha de esta campaña supone un "hito histórico", puesto que finalmente este sector al completo ha sabido "buscar la eficacia máxima para hacer llegar el mensaje a los consumidores".