Según dichos datos, la incidencia de los suicidios aumentó un 6% en 2008, registrándose un total de 5.706 casos, frente a los 5.377 de 2007, siendo la incidencia tres veces mayor entre los hombres que entre las mujeres.

También aumentaron los fallecimientos relacionados con el consumo de alcohol, que se situaron en 9.031 en 2008, frente a 8.724 en 2007, registrándose el doble de ellos entre varones.

“Ya habíamos observado un incremento en el número de suicidios en crisis económicas anteriores”, asegura el profesor Rory O’Connor, que dirige el departamento especializado en el estudio del comportamiento suicida de la Universidad de Stirling.

“El aumento de personas que pierden el empleo incrementa el riesgo de suicidio, debido a que los problemas financieros provocan dificultades en las relaciones familiares y de pareja”, añade este experto.

Los divorcios descendieron un cinco por ciento en Inglaterra y Gales en 2008, en total se produjeron 121.799, siendo el quinto año consecutivo de descenso, y el dato más bajo desde 1975

A la luz de estos datos, el Departamento de Sanidad británico ha anunciado el lanzamiento de una nueva campaña para la sensibilización sobre el consumo de alcohol.

“En torno al 25% de los británicos beben más de los límites diarios recomendados, y más de 2,5 millones lo hacen de modo regular por encima de los niveles de mayor riesgo, poniendo en peligro su salud”, subraya Liam Donaldson, asesor del ejecutivo británico en materia de sanidad.